Diferencia entre revisiones de «Diabetes mellitus tipo 2»

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* Diabetes sacarina de tipo 2.
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La '''diabetes mellitus tipo&nbsp;2''' (DM2) es un trastorno metabólico que se caracteriza por [[hiperglucemia]] (nivel alto de azúcar en la sangre) en el contexto de [[resistencia a la insulina]] y falta relativa de [[insulina]];<ref name="Pathologic Basis of Disease"/> en contraste con la [[diabetes mellitus tipo 1|diabetes mellitus tipo&nbsp;1]], en la que hay una falta absoluta de insulina debido a la destrucción de los [[islotes pancreáticos]].<ref name=Green2011>{{cite book|last=Shoback|first=edited by David G. Gardner, Dolores|title=Greenspan's basic & clinical endocrinology|year=2011|publisher=McGraw-Hill Medical|location=New York|isbn=0-07-162243-8|pages=Chapter 17|edition=9th}}</ref> Los síntomas clásicos son [[polidipsia|sed excesiva]], [[poliuria|micción frecuente]] y [[polifagia|hambre constante]]. La diabetes tipo&nbsp;2 representa alrededor del 90&nbsp;% de los casos de [[diabetes]], con el otro 10&nbsp;% debido principalmente a la diabetes mellitus tipo&nbsp;1 y la [[diabetes gestacional]]. Se piensa que la [[obesidad]] es la causa primaria de la diabetes tipo&nbsp;2 entre personas con predisposición genética a la enfermedad (aunque este no es el caso de las personas con ascendencia de [[Asia Oriental]]).
La '''diabetes mellitus tipo&nbsp;2''' (DM2) es un trastorno metabólico que se caracteriza por [[hiperglucemia]] (nivel alto de azúcar en la sangre) en el contexto de [[resistencia a la insulina]] y falta relativa de [[insulina]];<ref name="Pathologic Basis of Disease"/> en contraste con la [[diabetes mellitus tipo 1|diabetes mellitus tipo&nbsp;1]], en la que hay una falta absoluta de insulina debido a la destrucción de los [[islotes pancreáticos]].<ref name=Green2011>{{cite book|last=Shoback|first=edited by David G. Gardner, Dolores|title=Greenspan's basic & clinical endocrinology|year=2011|publisher=McGraw-Hill Medical|location=New York|isbn=0-07-162243-8|pages=Chapter 17|edition=9th}}</ref> Los síntomas clásicos son [[polidipsia|sed excesiva]], [[poliuria|micción frecuente]] y [[polifagia|hambre constante]]. La diabetes tipo&nbsp;2 representa alrededor del 90&nbsp;% de los casos de [[diabetes]], con el otro 10&nbsp;% debido principalmente a la diabetes mellitus tipo&nbsp;1 y la [[diabetes gestacional]]. Se piensa que la [[obesidad]] es la causa primaria de la diabetes tipo&nbsp;2 entre personas con predisposición genética a la enfermedad (aunque este no es el caso de las personas con ascendencia de [[Asia Oriental]]).


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=== Complicaciones ===
=== Complicaciones ===
La diabetes tipo&nbsp;2 es típicamente una enfermedad crónica asociada con una disminución de la esperanza de vida de diez años.<ref name="Will2011" /> Esto es debido en parte a una serie de complicaciones con las que se asocia, entre ellas: el riesgo de [[enfermedad cardiovascular]] aumentado dos a cuatro veces, incluida la [[Cardiopatía isquémica|enfermedad isquémica del corazón]] y [[derrame cerebral]]; un aumento de 20 veces en las [[Amputación|amputaciones]] de miembros inferiores y el aumento de las tasas de [[hospitalización]].<ref name="Will2011" /> En el mundo desarrollado, y cada vez más en otros lugares, la diabetes tipo&nbsp;2 es la mayor causa de [[ceguera]] no traumática y de [[insuficiencia renal]].<ref name="AFP09" /> También se ha asociado con un aumento del riesgo de [[disfunción cognitiva]] y [[demencia]] a través de procesos de enfermedad como la [[enfermedad de Alzheimer]] y la [[demencia vascular]].<ref>{{cite journal|last=Pasquier|first=F|title=Diabetes and cognitive impairment: how to evaluate the cognitive status?|journal=Diabetes & metabolism|date=October 2010|volume=36 Suppl 3|pages=S100–5|pmid=21211730|doi=10.1016/S1262-3636(10)70475-4}}</ref> Otras complicaciones incluyen [[acantosis nigricans]], [[disfunción sexual]] e infecciones frecuentes.<ref name="Vij2010" />
La diabetes tipo&nbsp;2 es típicamente una enfermedad crónica asociada con una disminución de la esperanza de vida de diez años.<ref name="Will2011" /> Esto es debido en parte a una serie de complicaciones con las que se asocia, entre ellas: el riesgo de [[enfermedad cardiovascular]] aumentado de dos a cuatro veces, incluida la [[Cardiopatía isquémica|enfermedad isquémica del corazón]] y [[derrame cerebral]]; un aumento de 20 veces en las [[Amputación|amputaciones]] de miembros inferiores y el aumento de las tasas de [[hospitalización]].<ref name="Will2011" /> En el mundo desarrollado, y cada vez más en otros lugares, la diabetes tipo&nbsp;2 es la mayor causa de [[ceguera]] no traumática y de [[insuficiencia renal]].<ref name="AFP09" /> También se ha asociado con un aumento del riesgo de [[disfunción cognitiva]] y [[demencia]] a través de procesos de enfermedad como la [[enfermedad de Alzheimer]] y la [[demencia vascular]].<ref>{{cite journal|last=Pasquier|first=F|title=Diabetes and cognitive impairment: how to evaluate the cognitive status?|journal=Diabetes & metabolism|date=October 2010|volume=36 Suppl 3|pages=S100–5|pmid=21211730|doi=10.1016/S1262-3636(10)70475-4}}</ref> Otras complicaciones incluyen [[acantosis nigricans]], [[disfunción sexual]] e infecciones frecuentes.<ref name="Vij2010" />


== Causa ==
== Causa ==
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=== Estilo de vida ===
=== Estilo de vida ===
Se sabe que un número de factores de estilo de vida son importantes en el desarrollo de la diabetes tipo&nbsp;2, como la obesidad y el [[sobrepeso]] (definido como un [[índice de masa corporal]] [IMC] superior a 25), la falta de actividad física, una dieta pobre, el [[estrés]] y la [[urbanización]].<ref name=Will2011/><ref>{{cite journal|last1=Abdullah|first1=A|last2=Peeters|first2=A|last3=de Courten|first3=M|last4=Stoelwinder|first4=J|title=The magnitude of association between overweight and obesity and the risk of diabetes: a meta-analysis of prospective cohort studies.|journal=Diabetes research and clinical practice|date=September 2010|volume=89|issue=3|pages=309–19|pmid=20493574|doi=10.1016/j.diabres.2010.04.012}}</ref> El exceso de grasa corporal está asociado con un 30&nbsp;% de los casos en los de ascendencia china y japonesa, el 60-80&nbsp;% en los de ascendencia europea y africana y el 100&nbsp;% en los indios Pima y las islas del Pacífico.<ref name=Green2011/> Los que no son obesos suelen tener una alta [[índice cintura/cadera]].<ref name=Green2011/>
Se sabe que un número de factores de estilo de vida son importantes en el desarrollo de la diabetes tipo&nbsp;2, como la obesidad y el [[sobrepeso]] (definido como un [[índice de masa corporal]] [IMC] superior a 25), la falta de actividad física, una dieta pobre, el [[estrés]] y la [[urbanización]].<ref name=Will2011/><ref>{{cite journal|last1=Abdullah|first1=A|last2=Peeters|first2=A|last3=de Courten|first3=M|last4=Stoelwinder|first4=J|title=The magnitude of association between overweight and obesity and the risk of diabetes: a meta-analysis of prospective cohort studies.|journal=Diabetes research and clinical practice|date=September 2010|volume=89|issue=3|pages=309–19|pmid=20493574|doi=10.1016/j.diabres.2010.04.012}}</ref> El exceso de grasa corporal está asociado con un 30&nbsp;% de los casos en los de ascendencia china y japonesa, el 60-80&nbsp;% en los de ascendencia europea y africana y el 100&nbsp;% en los indios Pima y las islas del Pacífico.<ref name=Green2011/> Los que no son obesos suelen tener un alto [[índice cintura/cadera]].<ref name=Green2011/>


Los factores dietéticos también influyen en el riesgo de desarrollar diabetes tipo&nbsp;2. El consumo excesivo de bebidas endulzadas con azúcar está asociado con un riesgo aumentado.<ref name=SSB2010>{{cite journal|last=Malik|first=VS|coauthors=Popkin, BM, Bray, GA, Després, JP, Hu, FB|title=Sugar Sweetened Beverages, Obesity, Type&nbsp;2 Diabetes and Cardiovascular Disease risk|journal=Circulation|date=2010-03-23|volume=121|issue=11|pages=1356–64|pmid=20308626|doi=10.1161/CIRCULATIONAHA.109.876185|pmc=2862465}}</ref><ref>{{cite journal|last=Malik|first=VS|coauthors=Popkin, BM, Bray, GA, Després, JP, Willett, WC, Hu, FB|title=Sugar-Sweetened Beverages and Risk of Metabolic Syndrome and Type 2 Diabetes: A meta-analysis|journal=Diabetes Care|date=November 2010|volume=33|issue=11|pages=2477–83|pmid=20693348|doi=10.2337/dc10-1079|pmc=2963518}}</ref> También es importante el tipo de grasas en la dieta: las [[grasas saturadas]] y los [[ácidos grasos trans]] aumentan el riesgo y las grasas [[Grasas poliinsaturadas|poliinsaturadas]] y [[Grasas monoinsaturadas|monoinsaturadas]] lo disminuyen.<ref name=Fat2009 /> Comer mucho [[arroz blanco]] parece desempeñar un papel en aumentar del riesgo.<ref>{{cite journal|last=Hu|first=EA|author2=Pan, A|author3=Malik, V|author4=Sun, Q|title=White rice consumption and risk of type 2 diabetes: meta-analysis and systematic review|journal=BMJ (Clinical research ed.)|date=2012-03-15|volume=344|pages=e1454|pmid=22422870|doi=10.1136/bmj.e1454|pmc=3307808}}</ref> Se cree que la falta de ejercicio provoca un 7&nbsp;% de los casos.<ref>{{cite journal|last=Lee|first=I-Min|author2=Shiroma, Eric J |author3=Lobelo, Felipe |author4=Puska, Pekka |author5=Blair, Steven N |author6= Katzmarzyk, Peter T |title=Effect of physical inactivity on major non-communicable diseases worldwide: an analysis of burden of disease and life expectancy|journal=The Lancet|date=1 July 2012|doi=10.1016/S0140-6736(12)61031-9|volume=380|issue=9838|pages=219–29|pmid=22818936|pmc=3645500}}</ref> Los [[contaminantes orgánicos persistentes]] también pueden desempeñar un papel.<ref>{{cite journal|last1=Lind|first1=L|last2=Lind|first2=PM|title=Can persistent organic pollutants and plastic-associated chemicals cause cardiovascular disease?|journal=Journal of internal medicine|date=Jun 2012|volume=271|issue=6|pages=537–53|pmid=22372998|doi=10.1111/j.1365-2796.2012.02536.x}}</ref>
Los factores dietéticos también influyen en el riesgo de desarrollar diabetes tipo&nbsp;2. El consumo excesivo de bebidas endulzadas con azúcar está asociado con un riesgo aumentado.<ref name=SSB2010>{{cite journal|last=Malik|first=VS|coauthors=Popkin, BM, Bray, GA, Després, JP, Hu, FB|title=Sugar Sweetened Beverages, Obesity, Type&nbsp;2 Diabetes and Cardiovascular Disease risk|journal=Circulation|date=2010-03-23|volume=121|issue=11|pages=1356–64|pmid=20308626|doi=10.1161/CIRCULATIONAHA.109.876185|pmc=2862465}}</ref><ref>{{cite journal|last=Malik|first=VS|coauthors=Popkin, BM, Bray, GA, Després, JP, Willett, WC, Hu, FB|title=Sugar-Sweetened Beverages and Risk of Metabolic Syndrome and Type 2 Diabetes: A meta-analysis|journal=Diabetes Care|date=November 2010|volume=33|issue=11|pages=2477–83|pmid=20693348|doi=10.2337/dc10-1079|pmc=2963518}}</ref> También es importante el tipo de grasas en la dieta: las [[grasas saturadas]] y los [[ácidos grasos trans]] aumentan el riesgo y las grasas [[Grasas poliinsaturadas|poliinsaturadas]] y [[Grasas monoinsaturadas|monoinsaturadas]] lo disminuyen.<ref name=Fat2009 /> Comer mucho [[arroz blanco]] parece desempeñar un papel en aumentar del riesgo.<ref>{{cite journal|last=Hu|first=EA|author2=Pan, A|author3=Malik, V|author4=Sun, Q|title=White rice consumption and risk of type 2 diabetes: meta-analysis and systematic review|journal=BMJ (Clinical research ed.)|date=2012-03-15|volume=344|pages=e1454|pmid=22422870|doi=10.1136/bmj.e1454|pmc=3307808}}</ref> Se cree que la falta de ejercicio provoca un 7&nbsp;% de los casos.<ref>{{cite journal|last=Lee|first=I-Min|author2=Shiroma, Eric J |author3=Lobelo, Felipe |author4=Puska, Pekka |author5=Blair, Steven N |author6= Katzmarzyk, Peter T |title=Effect of physical inactivity on major non-communicable diseases worldwide: an analysis of burden of disease and life expectancy|journal=The Lancet|date=1 July 2012|doi=10.1016/S0140-6736(12)61031-9|volume=380|issue=9838|pages=219–29|pmid=22818936|pmc=3645500}}</ref> Los [[contaminantes orgánicos persistentes]] también pueden desempeñar un papel.<ref>{{cite journal|last1=Lind|first1=L|last2=Lind|first2=PM|title=Can persistent organic pollutants and plastic-associated chemicals cause cardiovascular disease?|journal=Journal of internal medicine|date=Jun 2012|volume=271|issue=6|pages=537–53|pmid=22372998|doi=10.1111/j.1365-2796.2012.02536.x}}</ref>


=== Genética ===
=== Genética ===
La mayoría de los casos de diabetes implican muchos [[gen|genes]] y cada uno es pequeña contribución a una mayor probabilidad de convertirse en diabético tipo&nbsp;2.<ref name=Will2011/> Si un [[gemelo idéntico]] tiene diabetes, la posibilidad de que el otro desarrolle diabetes durante su vida es superior al 90&nbsp;%, mientras que la tasa para los hermanos no idénticos es de 25-50&nbsp;%.<ref name=Green2011/> Para 2011, se han encontrado más de 36 genes que contribuyen al riesgo de padecer diabetes tipo&nbsp;2.<ref name=Genetic2011>{{cite journal|last=Herder|first=C|author2=Roden, M|title=Genetics of type 2 diabetes: pathophysiologic and clinical relevance|journal=European journal of clinical investigation|date=June 2011|volume=41|issue=6|pages=679–92|pmid=21198561|doi=10.1111/j.1365-2362.2010.02454.x}}</ref> No obstante, tales genes solo representan el 10&nbsp;% del componente hereditario de la enfermedad.<ref name=Genetic2011/> El [[alelo]] [[TCF7L2]], por ejemplo, aumenta el riesgo de desarrollar diabetes en 1,5 veces y posee el mayor riesgo entre las variantes genéticas comunes.<ref name=Green2011/> La mayoría de los genes vinculados a la diabetes están implicados en las funciones de los [[islotes pancreáticos]].<ref name=Green2011/>
La mayoría de los casos de diabetes implican muchos [[gen|genes]] y cada uno es una pequeña contribución a una mayor probabilidad de convertirse en diabético tipo&nbsp;2.<ref name=Will2011/> Si un [[Gemelos (biología)|gemelo idéntico]] tiene diabetes, la posibilidad de que el otro desarrolle diabetes durante su vida es superior al 90&nbsp;%, mientras que la tasa para los hermanos no idénticos es de 25-50&nbsp;%.<ref name=Green2011/> Para 2011, se han encontrado más de 36 genes que contribuyen al riesgo de padecer diabetes tipo&nbsp;2.<ref name=Genetic2011>{{cite journal|last=Herder|first=C|author2=Roden, M|title=Genetics of type 2 diabetes: pathophysiologic and clinical relevance|journal=European journal of clinical investigation|date=June 2011|volume=41|issue=6|pages=679–92|pmid=21198561|doi=10.1111/j.1365-2362.2010.02454.x}}</ref> No obstante, tales genes solo representan el 10&nbsp;% del componente hereditario de la enfermedad.<ref name=Genetic2011/> El [[alelo]] [[TCF7L2]], por ejemplo, aumenta el riesgo de desarrollar diabetes en 1,5 veces y posee el mayor riesgo entre las variantes genéticas comunes.<ref name=Green2011/> La mayoría de los genes vinculados a la diabetes están implicados en las funciones de los [[islotes pancreáticos]].<ref name=Green2011/>


Existe una serie de casos raros de diabetes que surgen debido a una anormalidad en un solo gen (conocido como formas [[Enfermedad genética|monogénicas]] de diabetes o "[[Diabetes mellitus#Otros tipos de diabetes mellitus|otros tipos específicos de diabetes]]").<ref name=Green2011/><ref name=Will2011/> Estos incluyen la [[diabetes tipo MODY]], el [[síndrome de Donohue]] y el [[síndrome Rabson-Mendenhall]], entre otros.<ref name=Will2011/> La diabetes tipo MODY constituye el 1-5&nbsp;% de todos los casos de diabetes entre los jóvenes.<ref>{{cite news|title=Monogenic Forms of Diabetes: Neonatal Diabetes Mellitus and Maturity-onset Diabetes of the Young|date=March 2007|publisher=National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases, NIH|url =http://www.diabetes.niddk.nih.gov/dm/pubs/mody/|work =National Diabetes Information Clearinghouse (NDIC)|accessdate=2008-08-04}}</ref>
Existe una serie de casos raros de diabetes que surgen debido a una anormalidad en un solo gen (conocido como formas [[Enfermedad genética|monogénicas]] de diabetes u "[[Diabetes mellitus#Otros tipos de diabetes mellitus|otros tipos específicos de diabetes]]").<ref name=Green2011/><ref name=Will2011/> Estos incluyen la [[diabetes tipo MODY]], el [[síndrome de Donohue]] y el [[síndrome Rabson-Mendenhall]], entre otros.<ref name=Will2011/> La diabetes tipo MODY constituye el 1-5&nbsp;% de todos los casos de diabetes entre los jóvenes.<ref>{{cite news|title=Monogenic Forms of Diabetes: Neonatal Diabetes Mellitus and Maturity-onset Diabetes of the Young|date=March 2007|publisher=National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases, NIH|url =http://www.diabetes.niddk.nih.gov/dm/pubs/mody/|work =National Diabetes Information Clearinghouse (NDIC)|accessdate=2008-08-04}}</ref>


=== Condiciones médicas ===
=== Condiciones médicas ===
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{| class="wikitable" style = "float: right; margin-left:15px; text-align:center"
{| class="wikitable" style = "float: right; margin-left:15px; text-align:center"
|+ Criterios diagnósticos de la OMS<ref name=who2006>{{cite book|title=Definition and diagnosis of diabetes mellitus and intermediate hyperglycemia: report of a WHO/IDF consultation |url=http://www.who.int/diabetes/publications/Definition%20and%20diagnosis%20of%20diabetes_new.pdf |publisher=[[World Health Organization]] |location=Geneva |page=21 |year=2006 |isbn= 978-92-4-159493-6 }}</ref><ref>{{cite journal|last=Vijan|first=S|title=Type 2 diabetes |journal=[[Annals of Internal Medicine]] | date = March 2010 |volume=152 |issue=5 |page=ITC31-15 |pmid=20194231 |doi=10.1059/0003-4819-152-5-201003020-01003}}</ref>
|+ Criterios diagnósticos de la OMS<ref name=who2006>{{cite book|title=Definition and diagnosis of diabetes mellitus and intermediate hyperglycemia: report of a WHO/IDF consultation |url=http://www.who.int/diabetes/publications/Definition%20and%20diagnosis%20of%20diabetes_new.pdf |publisher=[[World Health Organization]] |location=Geneva |page=21 |year=2006 |isbn= 978-92-4-159493-6 }}</ref><ref>{{cite journal|last=Vijan|first=S|title=Type 2 diabetes |journal=[[Annals of Internal Medicine]] | date = March 2010 |volume=152 |issue=5 |page=ITC31-15 |pmid=20194231 |doi=10.1059/0003-4819-152-5-201003020-01003}}</ref>
&nbsp;{{ed|Template:OGTT}}
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!Condición !!Glucemia de 2 horas !!Glucemia en ayunas!!colspan=2| HbA<sub>1c</sub>
!Condición !!Glucemia de 2 horas !!Glucemia en ayunas!!colspan=2| HbA<sub>1c</sub>
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== Prevención ==
== Prevención ==
El inicio de la diabetes tipo&nbsp;2 se puede retrasar o prevenir a través de una nutrición adecuada y el ejercicio regular.<ref>{{cite journal |author=Raina Elley C, Kenealy T |title=Lifestyle interventions reduced the long-term risk of diabetes in adults with impaired glucose tolerance |journal=Evid Based Med |volume=13 |issue=6 |pages=173 |date=December 2008 |pmid=19043031 |doi=10.1136/ebm.13.6.173 }}</ref><ref>{{cite journal |author=Orozco LJ, Buchleitner AM, Gimenez-Perez G, Roqué I Figuls M, Richter B, Mauricio D |title=Exercise or exercise and diet for preventing type&nbsp;2 diabetes mellitus |journal=Cochrane Database Syst Rev |volume= |issue=3 |pages=CD003054 |year=2008 |pmid=18646086 |doi=10.1002/14651858.CD003054.pub3 |url= |editor1-last=Mauricio |editor1-first=Didac}}</ref>Medidas intensivas en el estilo de vida pueden reducir más de la mitad del riesgo.<ref name=AFP09/><ref name=Schellenberg2013>{{Cite journal | last1 = Schellenberg | first1 = ES. | last2 = Dryden | first2 = DM. | last3 = Vandermeer | first3 = B. | last4 = Ha | first4 = C. | last5 = Korownyk | first5 = C. | title = Lifestyle Interventions for Patients With and at Risk for Type 2 Diabetes: A Systematic Review and Meta-analysis | journal = Ann Intern Med | volume = 159 | issue = 8 | pages = 543–51 |date=October 2013 | doi = 10.7326/0003-4819-159-8-201310150-00007 | pmid = 24126648 }}</ref> El beneficio del ejercicio se produce independientemente del peso inicial o su consiguiente pérdida de peso.<ref>{{cite journal|last=O'Gorman|first=DJ|author2=Krook, A|title=Exercise and the treatment of diabetes and obesity|journal=The Medical clinics of North America|date=September 2011|volume=95|issue=5|pages=953–69|pmid=21855702|doi=10.1016/j.mcna.2011.06.007}}</ref> La evidencia para el beneficio de solo cambios en la dieta, sin embargo, es limitada:<ref>{{cite journal |author=Nield L, Summerbell CD, Hooper L, Whittaker V, Moore H |title=Dietary advice for the prevention of type 2 diabetes mellitus in adults |journal=Cochrane Database Syst Rev |volume= |issue=3 |pages=CD005102 |year=2008 |pmid=18646120 |doi=10.1002/14651858.CD005102.pub2 |url= |editor1-last=Nield |editor1-first=Lucie}}</ref> hay cierta evidencia para una dieta rica en verduras de hoja verde<ref>{{cite journal|last=Carter|first=P|coauthors=Gray, LJ, Troughton, J, Khunti, K, Davies, MJ|title=Fruit and vegetable intake and incidence of type 2 diabetes mellitus: systematic review and meta-analysis|journal=BMJ (Clinical research ed.)|date=2010-08-18|volume=341|pages=c4229|pmid=20724400|doi=10.1136/bmj.c4229|pmc=2924474}}</ref> y la restricción del consumo de bebidas azucaradas.<ref name=SSB2010>{{cite journal|last=Malik|first=VS|coauthors=Popkin, BM, Bray, GA, Després, JP, Hu, FB|title=Sugar Sweetened Beverages, Obesity, Type 2 Diabetes and Cardiovascular Disease risk|journal=Circulation|date=2010-03-23|volume=121|issue=11|pages=1356–64|pmid=20308626|doi=10.1161/CIRCULATIONAHA.109.876185|pmc=2862465}}</ref> En aquellos con [[intolerancia a la glucosa]], la dieta y el ejercicio, ya sea solos o en combinación con [[metformina]] o [[acarbosa]] puede disminuir el riesgo de desarrollar diabetes.<ref name=AFP09/><ref name=AHRQ05>{{cite journal |author=Santaguida PL, Balion C, Hunt D, et al. |title=Diagnosis, prognosis, and treatment of impaired glucose tolerance and impaired fasting glucose |journal=Evid Rep Technol Assess (Summ) |issue=128 |pages=1–11 |date=August 2005 |pmid=16194123 |url=http://www.ahrq.gov/downloads/pub/evidence/pdf/impglucose/impglucose.pdf |format=PDF}}</ref> Las intervenciones del estilo de vida son más eficaces que la metformina.<ref name=AFP09/> Mientras que niveles bajos de [[vitamina D]] están asociados con un mayor riesgo de diabetes, su corrección mediante suplementos de vitamina D3 no disminuye este riesgo.<ref>{{cite journal|last1=Seida|first1=Jennifer C.|last2=Mitri|first2=Joanna|last3=Colmers|first3=Isabelle N.|last4=Majumdar|first4=Sumit R.|last5=Davidson|first5=Mayer B.|last6=Edwards|first6=Alun L.|last7=Hanley|first7=David A.|last8=Pittas|first8=Anastassios G.|last9=Tjosvold|first9=Lisa|last10=Johnson|first10=Jeffrey A.|title=Effect of Vitamin D3 Supplementation on Improving Glucose Homeostasis and Preventing Diabetes: A Systematic Review and Meta-Analysis|journal=The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism|volume=99|issue=10|pages=3551–3560|doi=10.1210/jc.2014-2136|pmid=25062463|date=Oct 2014}}</ref>

El inicio de la diabetes tipo&nbsp;2 se puede retrasar o prevenir a través de una nutrición adecuada y el ejercicio regular.<ref>{{cite journal |author=Raina Elley C, Kenealy T |title=Lifestyle interventions reduced the long-term risk of diabetes in adults with impaired glucose tolerance |journal=Evid Based Med |volume=13 |issue=6 |pages=173 |date=December 2008 |pmid=19043031 |doi=10.1136/ebm.13.6.173 }}</ref><ref>{{cite journal |author=Orozco LJ, Buchleitner AM, Gimenez-Perez G, Roqué I Figuls M, Richter B, Mauricio D |title=Exercise or exercise and diet for preventing type&nbsp;2 diabetes mellitus |journal=Cochrane Database Syst Rev |volume= |issue=3 |pages=CD003054 |year=2008 |pmid=18646086 |doi=10.1002/14651858.CD003054.pub3 |url= |editor1-last=Mauricio |editor1-first=Didac}}</ref>Medidas intensivas de estilo de vida pueden reducir más de la mitad del riesgo.<ref name=AFP09/><ref name=Schellenberg2013>{{Cite journal | last1 = Schellenberg | first1 = ES. | last2 = Dryden | first2 = DM. | last3 = Vandermeer | first3 = B. | last4 = Ha | first4 = C. | last5 = Korownyk | first5 = C. | title = Lifestyle Interventions for Patients With and at Risk for Type 2 Diabetes: A Systematic Review and Meta-analysis | journal = Ann Intern Med | volume = 159 | issue = 8 | pages = 543–51 |date=October 2013 | doi = 10.7326/0003-4819-159-8-201310150-00007 | pmid = 24126648 }}</ref> El beneficio del ejercicio se produce independientemente del peso inicial o su consiguiente pérdida de peso.<ref>{{cite journal|last=O'Gorman|first=DJ|author2=Krook, A|title=Exercise and the treatment of diabetes and obesity|journal=The Medical clinics of North America|date=September 2011|volume=95|issue=5|pages=953–69|pmid=21855702|doi=10.1016/j.mcna.2011.06.007}}</ref> La evidencia para el beneficio de solo cambios en la dieta, sin embargo, es limitada:<ref>{{cite journal |author=Nield L, Summerbell CD, Hooper L, Whittaker V, Moore H |title=Dietary advice for the prevention of type 2 diabetes mellitus in adults |journal=Cochrane Database Syst Rev |volume= |issue=3 |pages=CD005102 |year=2008 |pmid=18646120 |doi=10.1002/14651858.CD005102.pub2 |url= |editor1-last=Nield |editor1-first=Lucie}}</ref> hay cierta evidencia para una dieta rica en verduras de hoja verde<ref>{{cite journal|last=Carter|first=P|coauthors=Gray, LJ, Troughton, J, Khunti, K, Davies, MJ|title=Fruit and vegetable intake and incidence of type 2 diabetes mellitus: systematic review and meta-analysis|journal=BMJ (Clinical research ed.)|date=2010-08-18|volume=341|pages=c4229|pmid=20724400|doi=10.1136/bmj.c4229|pmc=2924474}}</ref> y la restricción del consumo de bebidas azucaradas.<ref name=SSB2010>{{cite journal|last=Malik|first=VS|coauthors=Popkin, BM, Bray, GA, Després, JP, Hu, FB|title=Sugar Sweetened Beverages, Obesity, Type 2 Diabetes and Cardiovascular Disease risk|journal=Circulation|date=2010-03-23|volume=121|issue=11|pages=1356–64|pmid=20308626|doi=10.1161/CIRCULATIONAHA.109.876185|pmc=2862465}}</ref> En aquellos con [[intolerancia a la glucosa]], la dieta y el ejercicio, ya sea solos o en combinación con [[metformina]] o [[acarbosa]] puede disminuir el riesgo de desarrollar diabetes.<ref name=AFP09/><ref name=AHRQ05>{{cite journal |author=Santaguida PL, Balion C, Hunt D, et al. |title=Diagnosis, prognosis, and treatment of impaired glucose tolerance and impaired fasting glucose |journal=Evid Rep Technol Assess (Summ) |issue=128 |pages=1–11 |date=August 2005 |pmid=16194123 |url=http://www.ahrq.gov/downloads/pub/evidence/pdf/impglucose/impglucose.pdf |format=PDF}}</ref> Las intervenciones del estilo de vida son más eficaces que la metformina.<ref name=AFP09/> Mientras que niveles bajos de [[vitamina D]] están asociados con un mayor riesgo de diabetes, su corrección mediante suplementos de vitamina D3 no disminuye este riesgo.<ref>{{cite journal|last1=Seida|first1=Jennifer C.|last2=Mitri|first2=Joanna|last3=Colmers|first3=Isabelle N.|last4=Majumdar|first4=Sumit R.|last5=Davidson|first5=Mayer B.|last6=Edwards|first6=Alun L.|last7=Hanley|first7=David A.|last8=Pittas|first8=Anastassios G.|last9=Tjosvold|first9=Lisa|last10=Johnson|first10=Jeffrey A.|title=Effect of Vitamin D3 Supplementation on Improving Glucose Homeostasis and Preventing Diabetes: A Systematic Review and Meta-Analysis|journal=The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism|volume=99|issue=10|pages=3551–3560|doi=10.1210/jc.2014-2136|pmid=25062463|date=Oct 2014}}</ref>


== Control ==
== Control ==
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=== Estilo de vida ===
=== Estilo de vida ===
Una dieta adecuada y el ejercicio son los fundamentos de la atención diabética<ref name=Vij2010/> y una mayor cantidad de ejercicio surten mejores resultados.<ref name=Exercise10>{{cite journal |author=Zanuso S, Jimenez A, Pugliese G, Corigliano G, Balducci S |title=Exercise for the management of type&nbsp;2 diabetes: a review of the evidence |journal=Acta Diabetol |volume=47 |issue=1 |pages=15–22 |date=March 2010 |pmid=19495557 |doi=10.1007/s00592-009-0126-3 |url=}}</ref> El [[ejercicio aeróbico]] conduce a una disminución de la HbA<sub>1c</sub> y mejora la sensibilidad a la insulina.<ref name=Exercise10/> El [[entrenamiento de fuerza]] también es útil y la combinación de ambos tipos de ejercicio puede ser más eficaz.<ref name=Exercise10/> También es importante una [[dieta diabética|dieta para diabéticos]] que promueva la pérdida de peso.<ref name=Diet09/> Si bien el mejor tipo de dieta para lograr esto es controversial,<ref name=Diet09>{{cite journal |author=Davis N, Forbes B, Wylie-Rosett J |title=Nutritional strategies in type 2 diabetes mellitus |journal=Mt. Sinai J. Med. |volume=76 |issue=3 |pages=257–68 |date=June 2009 |pmid=19421969 |doi=10.1002/msj.20118 |url=}}</ref> una [[dieta de bajo índice glucémico]] ha demostrado mejorar el control de la glucemia.<ref>{{cite journal |author=Thomas D, Elliott EJ |title=Low glycaemic index, or low glycaemic load, diets for diabetes mellitus |journal=Cochrane Database Syst Rev |volume= |issue=1 |pages=CD006296 |year=2009 |pmid=19160276 |doi=10.1002/14651858.CD006296.pub2 |url= |editor1-last=Thomas |editor1-first=Diana}}</ref> La educación culturalmente apropiada puede ayudar a las personas con diabetes tipo&nbsp;2 a controlar su glucemia, por al menos seis meses.<ref>{{Cite journal | last1 = Hawthorne | first1 = K. | last2 = Robles | first2 = Y. | last3 = Cannings-John | first3 = R. | last4 = Edwards | first4 = A. G. K. | last5 = Robles | first5 = Yolanda | title = Culturally appropriate health education for Type 2 diabetes mellitus in ethnic minority groups | journal = Cochrane Database Syst Rev | year = 2008 | pages = CD006424 | issue = 3 | id = CD006424 | pmid = 18646153 | doi = 10.1002/14651858.CD006424.pub2 | editor1-last = Robles | editor1-first = Yolanda}}</ref> Si los cambios en el estilo de vida en la diabetes leve no ha resultado en una mejor glucemia luego de seis semanas, entonces deben considerarse medicamentos.<ref name=Vij2010/> No hay evidencia suficiente para determinar si las intervenciones del estilo de vida afectan a la mortalidad en aquellos que ya tienen diabetes mellitus tipo&nbsp;2.<ref>{{cite journal|last=Schellenberg|first=ES|author2=Dryden, DM |author3=Vandermeer, B |author4=Ha, C |author5= Korownyk, C |title=Lifestyle interventions for patients with and at risk for type 2 diabetes: a systematic review and meta-analysis|journal=Annals of internal medicine|date=15 October 2013|volume=159|issue=8|pages=543–51|pmid=24126648|doi=10.7326/0003-4819-159-8-201310150-00007}}</ref>
Una dieta adecuada y el ejercicio son los fundamentos de la atención diabética<ref name=Vij2010/> y una mayor cantidad de ejercicio surten mejores resultados.<ref name=Exercise10>{{cite journal |author=Zanuso S, Jimenez A, Pugliese G, Corigliano G, Balducci S |title=Exercise for the management of type&nbsp;2 diabetes: a review of the evidence |journal=Acta Diabetol |volume=47 |issue=1 |pages=15–22 |date=March 2010 |pmid=19495557 |doi=10.1007/s00592-009-0126-3 |url=}}</ref> El [[ejercicio aeróbico]] conduce a una disminución de la HbA<sub>1c</sub> y mejora la sensibilidad a la insulina.<ref name=Exercise10/> El [[entrenamiento de fuerza]] también es útil y la combinación de ambos tipos de ejercicio puede ser más eficaz.<ref name=Exercise10/> También es importante una [[dieta diabética|dieta para diabéticos]] que promueva la pérdida de peso.<ref name=Diet09/> Si bien el mejor tipo de dieta para lograr esto es controversial,<ref name=Diet09>{{cite journal |author=Davis N, Forbes B, Wylie-Rosett J |title=Nutritional strategies in type 2 diabetes mellitus |journal=Mt. Sinai J. Med. |volume=76 |issue=3 |pages=257–68 |date=June 2009 |pmid=19421969 |doi=10.1002/msj.20118 |url=}}</ref> una [[dieta de bajo índice glucémico]] ha demostrado mejorar el control de la glucemia.<ref>{{cite journal |author=Thomas D, Elliott EJ |title=Low glycaemic index, or low glycaemic load, diets for diabetes mellitus |journal=Cochrane Database Syst Rev |volume= |issue=1 |pages=CD006296 |year=2009 |pmid=19160276 |doi=10.1002/14651858.CD006296.pub2 |url= |editor1-last=Thomas |editor1-first=Diana}}</ref> La educación culturalmente apropiada puede ayudar a las personas con diabetes tipo&nbsp;2 a controlar su glucemia, por al menos seis meses.<ref>{{Cite journal | last1 = Hawthorne | first1 = K. | last2 = Robles | first2 = Y. | last3 = Cannings-John | first3 = R. | last4 = Edwards | first4 = A. G. K. | last5 = Robles | first5 = Yolanda | title = Culturally appropriate health education for Type 2 diabetes mellitus in ethnic minority groups | journal = Cochrane Database Syst Rev | year = 2008 | pages = CD006424 | issue = 3 | id = CD006424 | pmid = 18646153 | doi = 10.1002/14651858.CD006424.pub2 | editor1-last = Robles | editor1-first = Yolanda}}</ref> Si los cambios en el estilo de vida en la diabetes leve no han resultado en una mejor glucemia luego de seis semanas, entonces debe considerarse el uso de medicamentos.<ref name=Vij2010/> No hay evidencia suficiente para determinar si las intervenciones del estilo de vida afectan a la mortalidad en aquellos que ya tienen diabetes mellitus tipo&nbsp;2.<ref>{{cite journal|last=Schellenberg|first=ES|author2=Dryden, DM |author3=Vandermeer, B |author4=Ha, C |author5= Korownyk, C |title=Lifestyle interventions for patients with and at risk for type 2 diabetes: a systematic review and meta-analysis|journal=Annals of internal medicine|date=15 October 2013|volume=159|issue=8|pages=543–51|pmid=24126648|doi=10.7326/0003-4819-159-8-201310150-00007}}</ref>


=== Medicamentos ===
=== Medicamentos ===
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Hay disponible varias clases de medicamentos [[antidiabético|antidiabéticos]]. La [[metformina]] generalmente se recomienda como tratamiento de primera línea, ya que hay cierta evidencia de que disminuye la mortalidad;<ref name=AFP09/> sin embargo, esta conclusión es discutida.<ref>{{cite journal|last=Boussageon|first=R|author2=Supper, I |author3=Bejan-Angoulvant, T |author4=Kellou, N |author5=Cucherat, M |author6=Boissel, JP |author7=Kassai, B |author8=Moreau, A |author9=Gueyffier, F |author10= Cornu, C |title=Reappraisal of metformin efficacy in the treatment of type 2 diabetes: a meta-analysis of randomised controlled trials|journal=PLoS medicine|year=2012|volume=9|issue=4|pages=e1001204|pmid=22509138|doi=10.1371/journal.pmed.1001204|pmc=3323508|editor1-last=Groop|editor1-first=Leif}}</ref>
Hay disponible varias clases de medicamentos [[antidiabético|antidiabéticos]]. La [[metformina]] generalmente se recomienda como tratamiento de primera línea, ya que hay cierta evidencia de que disminuye la mortalidad;<ref name=AFP09/> sin embargo, esta conclusión es discutida.<ref>{{cite journal|last=Boussageon|first=R|author2=Supper, I |author3=Bejan-Angoulvant, T |author4=Kellou, N |author5=Cucherat, M |author6=Boissel, JP |author7=Kassai, B |author8=Moreau, A |author9=Gueyffier, F |author10= Cornu, C |title=Reappraisal of metformin efficacy in the treatment of type 2 diabetes: a meta-analysis of randomised controlled trials|journal=PLoS medicine|year=2012|volume=9|issue=4|pages=e1001204|pmid=22509138|doi=10.1371/journal.pmed.1001204|pmc=3323508|editor1-last=Groop|editor1-first=Leif}}</ref>


Puede añadirse un segundo agente oral de otra clase o insulina si la metformina no es suficiente después de tres meses.<ref name=ADA2015>{{cite journal|last1=Inzucchi|first1=SE|last2=Bergenstal|first2=RM|last3=Buse|first3=JB|last4=Diamant|first4=M|last5=Ferrannini|first5=E|last6=Nauck|first6=M|last7=Peters|first7=AL|last8=Tsapas|first8=A|last9=Wender|first9=R|last10=Matthews|first10=DR|title=Management of hyperglycaemia in type 2 diabetes, 2015: a patient-centred approach. Update to a Position Statement of the American Diabetes Association and the European Association for the Study of Diabetes.|journal=Diabetologia|date=March 2015|volume=58|issue=3|pages=429-42|pmid=25583541}}</ref> Entre otras clases de medicamentos: [[sulfonilureas]], [[tiazolidinediona|tiazolidinedionas]], [[inhibidores de la dipeptidil peptidasa-4]], inhibidores de SGLT2 y [[péptido similar al glucagón tipo 1]].<ref name="ADA2015">{{cite journal|last1=Inzucchi|first1=SE|last2=Bergenstal|first2=RM|last3=Buse|first3=JB|last4=Diamant|first4=M|last5=Ferrannini|first5=E|last6=Nauck|first6=M|last7=Peters|first7=AL|last8=Tsapas|first8=A|last9=Wender|first9=R|last10=Matthews|first10=DR|title=Management of hyperglycaemia in type 2 diabetes, 2015: a patient-centred approach. Update to a Position Statement of the American Diabetes Association and the European Association for the Study of Diabetes.|journal=Diabetologia|date=March 2015|volume=58|issue=3|pages=429-42|pmid=25583541}}</ref> No existe diferencia significativa entre estos agentes.<ref name=ADA2015/> La [[rosiglitazona]], una tiazolidindiona, no ha demostrado mejorar los resultados a largo plazo a pesar de que mejora la glucemia.<ref>{{cite journal|last=Richter|first=B|author2=Bandeira-Echtler, E |author3=Bergerhoff, K |author4=Clar, C |author5= Ebrahim, SH |title=Rosiglitazone for type 2 diabetes mellitus|journal=The Cochrane database of systematic reviews|date=18 July 2007|issue=3|pages=CD006063|pmid=17636824|doi=10.1002/14651858.CD006063.pub2|editor1-last=Richter|editor1-first=Bernd}}</ref> Adicionalmente se asocia con mayores tasas de enfermedades del corazón y muerte.<ref>{{cite journal|last=Chen|first=X|author2=Yang, L |author3=Zhai, SD |title=Risk of cardiovascular disease and all-cause mortality among diabetic patients prescribed rosiglitazone or pioglitazone: a meta-analysis of retrospective cohort studies|journal=Chinese medical journal|date=December 2012|volume=125|issue=23|pages=4301–6|pmid=23217404}}</ref> La metformina no debe utilizarse en aquellos con severos problemas renales o hepáticos. Las inyecciones de [[insulina]] se pueden añadir a la medicación oral o usar ​​solas.<ref name=AFP09/>
Puede añadirse un segundo agente oral de otra clase o insulina si la metformina no es suficiente después de tres meses.<ref name=ADA2015>{{cite journal|last1=Inzucchi|first1=SE|last2=Bergenstal|first2=RM|last3=Buse|first3=JB|last4=Diamant|first4=M|last5=Ferrannini|first5=E|last6=Nauck|first6=M|last7=Peters|first7=AL|last8=Tsapas|first8=A|last9=Wender|first9=R|last10=Matthews|first10=DR|title=Management of hyperglycaemia in type 2 diabetes, 2015: a patient-centred approach. Update to a Position Statement of the American Diabetes Association and the European Association for the Study of Diabetes.|journal=Diabetologia|date=March 2015|volume=58|issue=3|pages=429-42|pmid=25583541}}</ref> Entre otras clases de medicamentos se encuentran: [[sulfonilureas]], [[tiazolidinediona|tiazolidinedionas]], [[inhibidores de la dipeptidil peptidasa-4]], inhibidores de SGLT2 y [[péptido similar al glucagón tipo 1]].<ref name="ADA2015">{{cite journal|last1=Inzucchi|first1=SE|last2=Bergenstal|first2=RM|last3=Buse|first3=JB|last4=Diamant|first4=M|last5=Ferrannini|first5=E|last6=Nauck|first6=M|last7=Peters|first7=AL|last8=Tsapas|first8=A|last9=Wender|first9=R|last10=Matthews|first10=DR|title=Management of hyperglycaemia in type 2 diabetes, 2015: a patient-centred approach. Update to a Position Statement of the American Diabetes Association and the European Association for the Study of Diabetes.|journal=Diabetologia|date=March 2015|volume=58|issue=3|pages=429-42|pmid=25583541}}</ref> No existe diferencia significativa entre estos agentes.<ref name=ADA2015/> La [[rosiglitazona]], una tiazolidindiona, no ha demostrado mejorar los resultados a largo plazo a pesar de que mejora la glucemia.<ref>{{cite journal|last=Richter|first=B|author2=Bandeira-Echtler, E |author3=Bergerhoff, K |author4=Clar, C |author5= Ebrahim, SH |title=Rosiglitazone for type 2 diabetes mellitus|journal=The Cochrane database of systematic reviews|date=18 July 2007|issue=3|pages=CD006063|pmid=17636824|doi=10.1002/14651858.CD006063.pub2|editor1-last=Richter|editor1-first=Bernd}}</ref> Adicionalmente se asocia con mayores tasas de enfermedades del corazón y muerte.<ref>{{cite journal|last=Chen|first=X|author2=Yang, L |author3=Zhai, SD |title=Risk of cardiovascular disease and all-cause mortality among diabetic patients prescribed rosiglitazone or pioglitazone: a meta-analysis of retrospective cohort studies|journal=Chinese medical journal|date=December 2012|volume=125|issue=23|pages=4301–6|pmid=23217404}}</ref> La metformina no debe utilizarse en aquellos con severos problemas renales o hepáticos. Las inyecciones de [[insulina]] se pueden añadir a la medicación oral o usarse ​​solas.<ref name=AFP09/>


La mayoría de la gente no necesita inicialmente insulina.<ref name="Green2011" /> Cuando se utiliza, se añade normalmente en la noche una formulación de acción prolongada, manteniendo la medicamentación oral.<ref name="Vij2010" /><ref name="AFP09" /> Luego las dosis se aumentan para aumentar el efectuar y controlar la glucemia.<ref name="AFP09" /> Cuando la insulina nocturna es insuficiente, dos dosis diarias pueden lograr un mejor control.<ref name="Vij2010" /> Las insulinas de acción prolongada [[glargina]] y [[detemir]] son igualmente seguras y eficaces,<ref>{{Cite journal | last1 = Swinnen | first1 = SG. | last2 = Simon | first2 = AC. | last3 = Holleman | first3 = F. | last4 = Hoekstra | first4 = JB. | last5 = Devries | first5 = JH. | title = Insulin detemir versus insulin glargine for type 2 diabetes mellitus | journal = Cochrane Database Syst Rev | volume = | issue = 7 | pages = CD006383 | year = 2011 | doi = 10.1002/14651858.CD006383.pub2 | pmid = 21735405 | editor1-last = Simon | editor1-first = Airin CR }}</ref> y no parecen mucho mejor que la insulina [[protamina neutral Hagedorn|protamina neutra Hagedorn]] (NPH), pero ya que son mucho más caras, no son costo-efectivas.<ref>{{cite journal|last=Waugh|first=N|author2=Cummins, E|author3=Royle, P|author4=Clar, C|author5=Marien, M|author6=Richter, B|author7=Philip, S|title=Newer agents for blood glucose control in type 2 diabetes: systematic review and economic evaluation|journal=Health technology assessment (Winchester, England)|date=July 2010|volume=14|issue=36|pages=1–248|pmid=20646668|doi=10.3310/hta14360}}</ref> En [[embarazo|embarazadas]] la insulina es generalmente el tratamiento de elección.<ref name="Vij2010" /> Los [[inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina|inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina]] (IECA) previenen la [[Nefropatía diabética|enfermedad renal]] y mejoran los resultados en diabéticos;<ref>{{cite journal|last=Lv|first=J|author2=Perkovic, V |author3=Foote, CV |author4=Craig, ME |author5=Craig, JC |author6= Strippoli, GF |title=Antihypertensive agents for preventing diabetic kidney disease|journal=The Cochrane database of systematic reviews|date=12 December 2012|volume=12|pages=CD004136|pmid=23235603|doi=10.1002/14651858.CD004136.pub3|editor1-last=Strippoli|editor1-first=Giovanni FM}}</ref><ref name="Cheng2014">{{cite journal|last1=Cheng|first1=J|last2=Zhang|first2=W|last3=Zhang|first3=X|last4=Han|first4=F|last5=Li|first5=X|last6=He|first6=X|last7=Li|first7=Q|last8=Chen|first8=J|title=Effect of angiotensin-converting enzyme inhibitors and angiotensin II receptor blockers on all-cause mortality, cardiovascular deaths, and cardiovascular events in patients with diabetes mellitus: a meta-analysis.|journal=JAMA internal medicine|date=May 2014|volume=174|issue=5|pages=773–85|pmid=24687000|doi=10.1001/jamainternmed.2014.348}}</ref> a diferencia de los [[antagonista de los receptores de angiotensina II|antagonistas de los receptores de angiotensina II]] (ARA II).<ref name="Cheng2014" />
La mayoría de la gente no necesita inicialmente insulina.<ref name="Green2011" /> Cuando se utiliza, se añade normalmente en la noche una formulación de acción prolongada, manteniendo la medicamentación oral.<ref name="Vij2010" /><ref name="AFP09" /> Luego las dosis se aumentan para aumentar el efectuar y controlar la glucemia.<ref name="AFP09" /> Cuando la insulina nocturna es insuficiente, dos dosis diarias pueden lograr un mejor control.<ref name="Vij2010" /> Las insulinas de acción prolongada [[glargina]] y [[detemir]] son igualmente seguras y eficaces,<ref>{{Cite journal | last1 = Swinnen | first1 = SG. | last2 = Simon | first2 = AC. | last3 = Holleman | first3 = F. | last4 = Hoekstra | first4 = JB. | last5 = Devries | first5 = JH. | title = Insulin detemir versus insulin glargine for type 2 diabetes mellitus | journal = Cochrane Database Syst Rev | volume = | issue = 7 | pages = CD006383 | year = 2011 | doi = 10.1002/14651858.CD006383.pub2 | pmid = 21735405 | editor1-last = Simon | editor1-first = Airin CR }}</ref> y no parecen mucho mejor que la insulina [[protamina neutral Hagedorn|protamina neutra Hagedorn]] (NPH), pero ya que son mucho más caras, no son costo-efectivas.<ref>{{cite journal|last=Waugh|first=N|author2=Cummins, E|author3=Royle, P|author4=Clar, C|author5=Marien, M|author6=Richter, B|author7=Philip, S|title=Newer agents for blood glucose control in type 2 diabetes: systematic review and economic evaluation|journal=Health technology assessment (Winchester, England)|date=July 2010|volume=14|issue=36|pages=1–248|pmid=20646668|doi=10.3310/hta14360}}</ref> En [[embarazo|embarazadas]] la insulina es generalmente el tratamiento de elección.<ref name="Vij2010" /> Los [[inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina|inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina]] (IECA) previenen la [[Nefropatía diabética|enfermedad renal]] y mejoran los resultados en diabéticos;<ref>{{cite journal|last=Lv|first=J|author2=Perkovic, V |author3=Foote, CV |author4=Craig, ME |author5=Craig, JC |author6= Strippoli, GF |title=Antihypertensive agents for preventing diabetic kidney disease|journal=The Cochrane database of systematic reviews|date=12 December 2012|volume=12|pages=CD004136|pmid=23235603|doi=10.1002/14651858.CD004136.pub3|editor1-last=Strippoli|editor1-first=Giovanni FM}}</ref><ref name="Cheng2014">{{cite journal|last1=Cheng|first1=J|last2=Zhang|first2=W|last3=Zhang|first3=X|last4=Han|first4=F|last5=Li|first5=X|last6=He|first6=X|last7=Li|first7=Q|last8=Chen|first8=J|title=Effect of angiotensin-converting enzyme inhibitors and angiotensin II receptor blockers on all-cause mortality, cardiovascular deaths, and cardiovascular events in patients with diabetes mellitus: a meta-analysis.|journal=JAMA internal medicine|date=May 2014|volume=174|issue=5|pages=773–85|pmid=24687000|doi=10.1001/jamainternmed.2014.348}}</ref> a diferencia de los [[antagonista de los receptores de angiotensina II|antagonistas de los receptores de angiotensina II]] (ARA II).<ref name="Cheng2014" />


=== Cirugía ===
=== Cirugía ===
La [[Cirugía bariátrica|cirugía de pérdida de peso]] en obesos es una medida eficaz para tratar la diabetes.<ref>{{cite journal |last=Picot |first=J|author2=Jones, J|author3=Colquitt, JL|author4=Gospodarevskaya, E|author5=Loveman, E|author6=Baxter, L|author7=Clegg, AJ|title=The clinical effectiveness and cost-effectiveness of bariatric (weight loss) surgery for obesity: a systematic review and economic evaluation |journal=Health technology assessment (Winchester, England)|date=September 2009|volume=13 |issue=41 |pages=1–190, 215–357, iii–iv|pmid=19726018 |doi=10.3310/hta13410}}</ref> Muchos son capaces de mantener glucemias normales con poco o ningún medicamento después de la cirugía<ref>{{cite journal|last=Frachetti|first=KJ|author2=Goldfine, AB|title=Bariatric surgery for diabetes management|journal=Current Opinion in Endocrinology, Diabetes and Obesity |date=April 2009 |volume=16 |issue=2|pages=119–24 |pmid=19276974 |doi=10.1097/MED.0b013e32832912e7}}</ref> y la mortalidad a largo plazo disminuye.<ref name=Schum2009/> Sin embargo, la cirugía tiene cierto riesgo de mortalidad a corto plazo de menos del 1&nbsp;%.<ref>{{cite journal |last=Colucci|first=RA|title=Bariatric surgery in patients with type 2 diabetes: a viable option |journal=Postgraduate Medicine|date=January 2011 |volume=123 |issue=1 |pages=24–33|pmid=21293081 |doi=10.3810/pgm.2011.01.2242}}</ref> Los puntos de corte de [[índice de masa corporal]] para los que la cirugía es apropiada todavía no están claros.<ref name=Schum2009>{{cite journal|last=Schulman|first=AP|coauthors=del Genio, F, Sinha, N, Rubino, F|title="Metabolic" surgery for treatment of type 2 diabetes mellitus|journal=Endocrine practice : official journal of the American College of Endocrinology and the American Association of Clinical Endocrinologists |date=September–October 2009|volume=15|issue=6|pages=624–31 |pmid=19625245 |doi=10.4158/EP09170.RAR}}</ref> Se recomienda que se considere esta opción en quienes son incapaces de mantener bajo control tanto su peso como glucemia.<ref>{{cite journal |last=Dixon |first=JB |coauthors=le Roux, CW; Rubino, F; Zimmet, P|title=Bariatric surgery for type 2 diabetes |journal=Lancet|date=16 June 2012|volume=379|issue=9833|pages=2300–11 |pmid=22683132 |doi=10.1016/S0140-6736(12)60401-2}}</ref>
La [[Cirugía bariátrica|cirugía de pérdida de peso]] en obesos es una medida eficaz para tratar la diabetes.<ref>{{cite journal |last=Picot |first=J|author2=Jones, J|author3=Colquitt, JL|author4=Gospodarevskaya, E|author5=Loveman, E|author6=Baxter, L|author7=Clegg, AJ|title=The clinical effectiveness and cost-effectiveness of bariatric (weight loss) surgery for obesity: a systematic review and economic evaluation |journal=Health technology assessment (Winchester, England)|date=September 2009|volume=13 |issue=41 |pages=1–190, 215–357, iii–iv|pmid=19726018 |doi=10.3310/hta13410}}</ref> Muchos son capaces de mantener glucemias normales con poco o ningún medicamento después de la cirugía<ref>{{cite journal|last=Frachetti|first=KJ|author2=Goldfine, AB|title=Bariatric surgery for diabetes management|journal=Current Opinion in Endocrinology, Diabetes and Obesity |date=April 2009 |volume=16 |issue=2|pages=119–24 |pmid=19276974 |doi=10.1097/MED.0b013e32832912e7}}</ref> y la mortalidad a largo plazo disminuye.<ref name=Schum2009/> Sin embargo, la cirugía tiene cierto riesgo de mortalidad a corto plazo de menos del 1&nbsp;%.<ref>{{cite journal |last=Colucci|first=RA|title=Bariatric surgery in patients with type 2 diabetes: a viable option |journal=Postgraduate Medicine|date=January 2011 |volume=123 |issue=1 |pages=24–33|pmid=21293081 |doi=10.3810/pgm.2011.01.2242}}</ref> Los puntos de corte de [[índice de masa corporal]] para los que la cirugía es apropiada todavía no están claros.<ref name=Schum2009>{{cite journal|last=Schulman|first=AP|coauthors=del Genio, F, Sinha, N, Rubino, F|title="Metabolic" surgery for treatment of type 2 diabetes mellitus|journal=Endocrine practice : official journal of the American College of Endocrinology and the American Association of Clinical Endocrinologists |date=September–October 2009|volume=15|issue=6|pages=624–31 |pmid=19625245 |doi=10.4158/EP09170.RAR}}</ref> Se recomienda que se considere esta opción en quienes son incapaces de mantener bajo control tanto su peso como su glucemia.<ref>{{cite journal |last=Dixon |first=JB |coauthors=le Roux, CW; Rubino, F; Zimmet, P|title=Bariatric surgery for type 2 diabetes |journal=Lancet|date=16 June 2012|volume=379|issue=9833|pages=2300–11 |pmid=22683132 |doi=10.1016/S0140-6736(12)60401-2}}</ref>


== Epidemiología ==
== Epidemiología ==
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Para 2010, a nivel mundial a partir de se estimaba que había 285 millones de personas con diabetes tipo&nbsp;2, lo que constituye cerca del 90&nbsp;% de los casos de diabetes.<ref name=Will2011>{{cite book|title=Williams textbook of endocrinology.|publisher=Elsevier/Saunders|location=Philadelphia|isbn=978-1-4377-0324-5|pages=1371–1435|edition=12th}}</ref> Esto equivale a aproximadamente el 6&nbsp;% de la población adulta del mundo.<ref name=Mee2007>{{cite journal|last1=Meetoo|first1=D|last2==McGovern|first2=P|last3=Safadi|first3=R|title=An epidemiological overview of diabetes across the world|journal=British journal of nursing (Mark Allen Publishing)|date=13–27 September 2007|volume=16|issue=16|pages=1002–7|pmid=18026039}}</ref> La diabetes es común tanto en el [[país desarrollado|mundo desarrollado]] como [[País en vías de desarrollo|en vías de desarrollo]].<ref name=Will2011/> No obstante, sigue siendo poco común en los [[País subdesarrollado|países subdesarrollados]].<ref name=Green2011/>
Para 2010, a nivel mundial a partir de se estimaba que había 285 millones de personas con diabetes tipo&nbsp;2, lo que constituye cerca del 90&nbsp;% de los casos de diabetes.<ref name=Will2011>{{cite book|title=Williams textbook of endocrinology.|publisher=Elsevier/Saunders|location=Philadelphia|isbn=978-1-4377-0324-5|pages=1371–1435|edition=12th}}</ref> Esto equivale a aproximadamente el 6&nbsp;% de la población adulta del mundo.<ref name=Mee2007>{{cite journal|last1=Meetoo|first1=D|last2==McGovern|first2=P|last3=Safadi|first3=R|title=An epidemiological overview of diabetes across the world|journal=British journal of nursing (Mark Allen Publishing)|date=13–27 September 2007|volume=16|issue=16|pages=1002–7|pmid=18026039}}</ref> La diabetes es común tanto en el [[país desarrollado|mundo desarrollado]] como en el de [[país en vías de desarrollo|vías de desarrollo]].<ref name=Will2011/> No obstante, sigue siendo poco común en los [[País subdesarrollado|países subdesarrollados]].<ref name=Green2011/>


Las mujeres parecen estar en mayor riesgo al igual que ciertos grupos étnicos,<ref name="Will2011" /><ref>{{cite journal |author=Abate N, Chandalia M |title=Ethnicity and type 2 diabetes: focus on Asian Indians |journal=J. Diabetes Complicat. |volume=15 |issue=6 |pages=320–7 |year=2001 |pmid=11711326 |doi= 10.1016/S1056-8727(01)00161-1|url=}}</ref> como quienes del Sudeste Asiático, de las islas del Pacífico, los latinos y los nativos americanos.<ref name="Vij2010" /> Esto puede ser debido a una mejor sensibilidad a un estilo de vida occidental en ciertos grupos étnicos.<ref>{{cite journal|last1=Carulli|first1=L|last2=Rondinella|first2=S|last3=Lombardini|first3=S|last4=Canedi|first4=I|last5=Loria|first5=P|last6=Carulli|first6=N|title=Review article: diabetes, genetics and ethnicity|journal=Alimentary pharmacology & therapeutics|date=November 2005|volume=22 Suppl 2|pages=16–9|pmid=16225465|doi=10.1111/j.1365-2036.2005.02588.x}}</ref> Considerada tradicionalmente una enfermedad de adultos, la diabetes tipo&nbsp;2 se diagnostica cada vez más en los niños en paralelo con las tasas de [[obesidad]] en alza.<ref name="Will2011" /> La diabetes tipo&nbsp;2 se diagnostica ahora con tanta frecuencia como la diabetes tipo&nbsp;1 en los adolescentes de Estados Unidos.<ref name="Green2011" />
Las mujeres parecen estar en mayor riesgo al igual que ciertos grupos étnicos,<ref name="Will2011" /><ref>{{cite journal |author=Abate N, Chandalia M |title=Ethnicity and type 2 diabetes: focus on Asian Indians |journal=J. Diabetes Complicat. |volume=15 |issue=6 |pages=320–7 |year=2001 |pmid=11711326 |doi= 10.1016/S1056-8727(01)00161-1|url=}}</ref> como quienes del Sudeste Asiático, de las islas del Pacífico, los latinos y los nativos americanos.<ref name="Vij2010" /> Esto puede ser debido a una mejor sensibilidad a un estilo de vida occidental en ciertos grupos étnicos.<ref>{{cite journal|last1=Carulli|first1=L|last2=Rondinella|first2=S|last3=Lombardini|first3=S|last4=Canedi|first4=I|last5=Loria|first5=P|last6=Carulli|first6=N|title=Review article: diabetes, genetics and ethnicity|journal=Alimentary pharmacology & therapeutics|date=November 2005|volume=22 Suppl 2|pages=16–9|pmid=16225465|doi=10.1111/j.1365-2036.2005.02588.x}}</ref> Considerada tradicionalmente una enfermedad de adultos, la diabetes tipo&nbsp;2 se diagnostica cada vez más en los niños en paralelo con el alza de las tasas de [[obesidad]].<ref name="Will2011" /> La diabetes tipo&nbsp;2 se diagnostica ahora con tanta frecuencia como la diabetes tipo&nbsp;1 en los adolescentes de Estados Unidos.<ref name="Green2011" />


Las tasas de diabetes en 1985 se estimaron en 30 millones, lo que aumentó a 135 millones en 1995 y 217 millones en 2005.<ref name="Epi2006">{{cite journal|last1=Smyth|first1=S|last2=Heron|first2=A|title=Diabetes and obesity: the twin epidemics|journal=Nature Medicine|date=January 2006|volume=12|issue=1|pages=75–80|pmid=16397575|doi=10.1038/nm0106-75}}</ref> Se cree que este aumento se debe principalmente al envejecimiento de la población mundial, una disminución del ejercicio y las crecientes tasas de obesidad.<ref name="Epi2006" /> Para 2010, los cinco países con el mayor número de personas con diabetes son la India (31,7 millones), China (20,8), los Estados Unidos (17,7), Indonesia (8,4) y Japón (6,8).<ref name="Wild 2004">{{cite journal |author=Wild S, Roglic G, Green A, Sicree R, King H |title=Global prevalence of diabetes: estimates for the year 2000 and projections for 2030 |journal=Diabetes Care |volume=27 |issue=5 |pages=1047–53 |date=May 2004 |pmid=15111519|doi= 10.2337/diacare.27.5.1047|url=}}</ref> La [[Organización Mundial de la Salud]] la reconoció la diabetes como una [[epidemia]] global.<ref>{{cite web|title=Diabetes Fact sheet N°312|url=http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs312/en/|work=World Health Organization|accessdate=2012-01-09|date=August 2011}}</ref>
Las tasas de diabetes en 1985 se estimaron en 30 millones, lo que aumentó a 135 millones en 1995 y 217 millones en 2005.<ref name="Epi2006">{{cite journal|last1=Smyth|first1=S|last2=Heron|first2=A|title=Diabetes and obesity: the twin epidemics|journal=Nature Medicine|date=January 2006|volume=12|issue=1|pages=75–80|pmid=16397575|doi=10.1038/nm0106-75}}</ref> Se cree que este aumento se debe principalmente al envejecimiento de la población mundial, una disminución del ejercicio y las crecientes tasas de obesidad.<ref name="Epi2006" /> Para 2010, los cinco países con el mayor número de personas con diabetes son la India (31,7 millones), China (20,8), los Estados Unidos (17,7), Indonesia (8,4) y Japón (6,8).<ref name="Wild 2004">{{cite journal |author=Wild S, Roglic G, Green A, Sicree R, King H |title=Global prevalence of diabetes: estimates for the year 2000 and projections for 2030 |journal=Diabetes Care |volume=27 |issue=5 |pages=1047–53 |date=May 2004 |pmid=15111519|doi= 10.2337/diacare.27.5.1047|url=}}</ref> La [[Organización Mundial de la Salud]] la reconoció la diabetes como una [[epidemia]] global.<ref>{{cite web|title=Diabetes Fact sheet N°312|url=http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs312/en/|work=World Health Organization|accessdate=2012-01-09|date=August 2011}}</ref>


== Historia ==
== Historia ==
La diabetes es una de las primeras enfermedades descritas.<ref>{{cite book|last=Ripoll|first=Brian C. Leutholtz, Ignacio|title=Exercise and disease management|publisher=CRC Press|location=Boca Raton|isbn=978-1-4398-2759-8|page=25|url=http://books.google.ca/books?id=eAn9-bm_pi8C&pg=PA25|edition=2nd|date=2011-04-25}}</ref> Un manuscrito egipcio de [[c.]] 1500 a. C. menciona "vaciado demasiado grande de la orina".<ref name=History2010/> Los primeros casos descritos se cree que son de diabetes tipo&nbsp;1.<ref name=History2010>{{cite book|last=editor|first=Leonid Poretsky, |title=Principles of diabetes mellitus|year=2009|publisher=Springer|location=New York|isbn=978-0-387-09840-1|page=3|url=http://books.google.ca/books?id=i0qojvF1SpUC&pg=PA3|edition=2nd}}</ref> Los médicos indios alrededor del mismo tiempo identificaron la enfermedad y la clasificaron como ''madhumeha'' u ''orina miel'' al notar que la orina atraía a las hormigas.<ref name=History2010/> El término "diabetes" o "pasar a través de" fue utilizado por primera vez en 230 a. C. por el griego [[Apolonio de Memphis]].<ref name=History2010/> La enfermedad era rara durante el tiempo del [[Imperio Romano]], [[Galeno]] comentó que solo había visto dos casos durante su carrera.<ref name=History2010/>


La diabetes tipo&nbsp;1 y tipo&nbsp;2 fueron identificados como condiciones separadas por primera vez por los médicos indios Sushruta y Charaka entre 400-500 d. C. con el tipo&nbsp;1 asociado con la juventud y el tipo&nbsp;2 con el sobrepeso.<ref name=History2010/> El término "mellitus" o "de miel" fue introducido por el británico John Rolle a finales de 1700 para distinguirla de la [[diabetes insípida]], que también se asocia con la micción frecuente.<ref name=History2010/> El tratamiento efectivo no se desarrolló hasta la primera mitad del siglo XX, cuando los nobeles canadienses [[Frederick Banting]] y [[Charles Best]] descubrieron la insulina entre 1921 y 1922.<ref name=History2010/> Esto fue seguido por el desarrollo de la insulina de acción prolongada ([[Insulina NPH|NPH]]) en la década de 1940.<ref name=History2010/>
La diabetes es una de las primeras enfermedades descritas.<ref>{{cite book|last=Ripoll|first=Brian C. Leutholtz, Ignacio|title=Exercise and disease management|publisher=CRC Press|location=Boca Raton|isbn=978-1-4398-2759-8|page=25|url=http://books.google.ca/books?id=eAn9-bm_pi8C&pg=PA25|edition=2nd|date=2011-04-25}}</ref> Un manuscrito egipcio de [[c.]] 1500 a. C. menciona "vaciado demasiado grande de la orina".<ref name=History2010/> Los primeros casos descritos se cree que son de diabetes tipo&nbsp;1.<ref name=History2010>{{cite book|last=editor|first=Leonid Poretsky, |title=Principles of diabetes mellitus|year=2009|publisher=Springer|location=New York|isbn=978-0-387-09840-1|page=3|url=http://books.google.ca/books?id=i0qojvF1SpUC&pg=PA3|edition=2nd}}</ref> Los médicos indios alrededor del mismo tiempo identificaron la enfermedad y la clasificaron como ''madhumeha'' u ''orina miel'' al notar que la orina atraía a las hormigas.<ref name=History2010/> El término "diabetes" o "pasar a través" fue utilizado por primera vez en 230 a. C. por el griego [[Apolonio de Memphis]].<ref name=History2010/> La enfermedad era rara durante el tiempo del [[Imperio Romano]] y [[Galeno]] comentó que solo había visto dos casos durante su carrera.<ref name=History2010/>

La diabetes tipo&nbsp;1 y tipo&nbsp;2 fueron identificados como condiciones separadas por primera vez por los médicos indios Sushruta y Charaka en 400-500 d. C. con el tipo&nbsp;1 asociado con la juventud y el tipo&nbsp;2 con el sobrepeso.<ref name=History2010/> El término "mellitus" o "de miel" fue introducido por el británico John Rolle a finales de 1700 para distinguirla de la [[diabetes insípida]], que también se asocia con la micción frecuente.<ref name=History2010/> El tratamiento efectivo no se desarrolló hasta la primera mitad del siglo XX, cuando los nobeles canadienses [[Frederick Banting]] y [[Charles Best]] descubrieron la insulina entre 1921 y 1922.<ref name=History2010/> Esto fue seguido por el desarrollo de la insulina de acción prolongada [[Insulina NPH|NPH]] en la década de 1940.<ref name=History2010/>


== Véase también ==
== Véase también ==

Revisión del 18:55 1 abr 2015

Diabetes mellitus tipo 2

Círculo azul, símbolo universal de la diabetes.[1]
Especialidad medicina familiar
endocrinología
eMedicine article/117853
Sinónimos
  • Diabetes de tipo 2
  • Diabetes del adulto
  • Diabetes independiente de la insulina
  • Diabetes no dependiente de la insulina
  • Diabetes no insulinodependiente
  • Diabetes mellitus del adulto
  • Diabetes mellitus independiente de la insulina (DMII)
  • Diabetes mellitus no dependiente de la insulina (DMNDI)
  • Diabetes mellitus no insulinoindependiente (DMNID)
  • Diabetes sacarina de tipo 2.

La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) es un trastorno metabólico que se caracteriza por hiperglucemia (nivel alto de azúcar en la sangre) en el contexto de resistencia a la insulina y falta relativa de insulina;[2]​ en contraste con la diabetes mellitus tipo 1, en la que hay una falta absoluta de insulina debido a la destrucción de los islotes pancreáticos.[3]​ Los síntomas clásicos son sed excesiva, micción frecuente y hambre constante. La diabetes tipo 2 representa alrededor del 90 % de los casos de diabetes, con el otro 10 % debido principalmente a la diabetes mellitus tipo 1 y la diabetes gestacional. Se piensa que la obesidad es la causa primaria de la diabetes tipo 2 entre personas con predisposición genética a la enfermedad (aunque este no es el caso de las personas con ascendencia de Asia Oriental).

La diabetes tipo 2 es controlada inicialmente con el aumento de ejercicio y cambios en la dieta. Si la glucemia no baja adecuadamente con estas medidas, pueden ser necesarios medicamentos como la metformina o la insulina. En los pacientes tratados con insulina, típicamente existe el requisito de revisar rutinariamente la glucemia.

Las tasas de diabetes tipo 2 han aumentado notablemente desde 1960, en paralelo con la obesidad. Para 2010 había aproximadamente 285 millones de personas diagnosticadas con la enfermedad en comparación con alrededor de 30 millones en 1985.[4][5]​ Las complicaciones a largo plazo de la hiperglucemia pueden incluir enfermedades del corazón, derrames cerebrales, retinopatía diabética (afecta la vista), insuficiencia renal que puede requerir diálisis y mala circulación en las extremidades que conduce a amputaciones. La cetoacidosis, una complicación aguda y característica de la diabetes tipo 1, es poco común,[6]​ sin embargo puede ocurrir un coma hiperosmolar hiperglucémico.

Signos y síntomas

Panorama de los síntomas más significativos de la diabetes.

Los síntomas clásicos de la diabetes son poliuria (micción frecuente), polidipsia (aumento de la sed), polifagia (aumento del hambre) y pérdida de peso.[7]​ Otros síntomas que se presentan comúnmente en el diagnóstico incluyen una historia de visión borrosa, picazón, neuropatía periférica, infecciones vaginales recurrentes y fatiga.[3]​ Muchas personas, sin embargo, no tienen síntomas durante los primeros años y se les diagnostica en los exámenes de rutina.[3]​ Las personas con diabetes mellitus tipo 2 pueden presentar rara vez un coma hiperosmolar hiperglucémico, un estado de glucemia muy alta asociada con una disminución de la conciencia e hipotensión.[3]

Complicaciones

La diabetes tipo 2 es típicamente una enfermedad crónica asociada con una disminución de la esperanza de vida de diez años.[4]​ Esto es debido en parte a una serie de complicaciones con las que se asocia, entre ellas: el riesgo de enfermedad cardiovascular aumentado de dos a cuatro veces, incluida la enfermedad isquémica del corazón y derrame cerebral; un aumento de 20 veces en las amputaciones de miembros inferiores y el aumento de las tasas de hospitalización.[4]​ En el mundo desarrollado, y cada vez más en otros lugares, la diabetes tipo 2 es la mayor causa de ceguera no traumática y de insuficiencia renal.[8]​ También se ha asociado con un aumento del riesgo de disfunción cognitiva y demencia a través de procesos de enfermedad como la enfermedad de Alzheimer y la demencia vascular.[9]​ Otras complicaciones incluyen acantosis nigricans, disfunción sexual e infecciones frecuentes.[7]

Causa

El desarrollo de la diabetes tipo 2 es causada por una combinación de estilo de vida y factores genéticos.[8][10]​ Aunque algunos de estos factores están bajo el control personal, como la dieta y la obesidad, otros factores no lo están, como el envejecimiento, el sexo femenino y la genética.[4]​ Se ha asociado la falta de sueño con la diabetes tipo 2.[11]​ Se cree que esta actúa a través de su efecto sobre el metabolismo.[11]​ El estado nutricional de una madre durante el desarrollo fetal puede también desempeñar un papel, uno de cuyos mecanismos propuestos es la metilación alterada del ADN.[12]

Estilo de vida

Se sabe que un número de factores de estilo de vida son importantes en el desarrollo de la diabetes tipo 2, como la obesidad y el sobrepeso (definido como un índice de masa corporal [IMC] superior a 25), la falta de actividad física, una dieta pobre, el estrés y la urbanización.[4][13]​ El exceso de grasa corporal está asociado con un 30 % de los casos en los de ascendencia china y japonesa, el 60-80 % en los de ascendencia europea y africana y el 100 % en los indios Pima y las islas del Pacífico.[3]​ Los que no son obesos suelen tener un alto índice cintura/cadera.[3]

Los factores dietéticos también influyen en el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. El consumo excesivo de bebidas endulzadas con azúcar está asociado con un riesgo aumentado.[14][15]​ También es importante el tipo de grasas en la dieta: las grasas saturadas y los ácidos grasos trans aumentan el riesgo y las grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas lo disminuyen.[10]​ Comer mucho arroz blanco parece desempeñar un papel en aumentar del riesgo.[16]​ Se cree que la falta de ejercicio provoca un 7 % de los casos.[17]​ Los contaminantes orgánicos persistentes también pueden desempeñar un papel.[18]

Genética

La mayoría de los casos de diabetes implican muchos genes y cada uno es una pequeña contribución a una mayor probabilidad de convertirse en diabético tipo 2.[4]​ Si un gemelo idéntico tiene diabetes, la posibilidad de que el otro desarrolle diabetes durante su vida es superior al 90 %, mientras que la tasa para los hermanos no idénticos es de 25-50 %.[3]​ Para 2011, se han encontrado más de 36 genes que contribuyen al riesgo de padecer diabetes tipo 2.[19]​ No obstante, tales genes solo representan el 10 % del componente hereditario de la enfermedad.[19]​ El alelo TCF7L2, por ejemplo, aumenta el riesgo de desarrollar diabetes en 1,5 veces y posee el mayor riesgo entre las variantes genéticas comunes.[3]​ La mayoría de los genes vinculados a la diabetes están implicados en las funciones de los islotes pancreáticos.[3]

Existe una serie de casos raros de diabetes que surgen debido a una anormalidad en un solo gen (conocido como formas monogénicas de diabetes u "otros tipos específicos de diabetes").[3][4]​ Estos incluyen la diabetes tipo MODY, el síndrome de Donohue y el síndrome Rabson-Mendenhall, entre otros.[4]​ La diabetes tipo MODY constituye el 1-5 % de todos los casos de diabetes entre los jóvenes.[20]

Condiciones médicas

Hay medicamentos y otros problemas de salud que pueden predisponer a la diabetes.[21]​ Algunos de los medicamentos son: glucocorticoides, tiazidas, los beta bloqueadores, los antipsicóticos atípicos[22]​ y las estatinas.[23]​ Las mujeres que previamente han tenido diabetes gestacional corren un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.[7]​ Otros problemas de salud que están asociados incluyen: acromegalia, síndrome de Cushing, hipertiroidismo, feocromocitoma y ciertos tipos de cáncer, como glucagonomas.[21]​ La deficiencia de testosterona también está asociada con la diabetes tipo 2.[24][25]

Fisiopatología

La diabetes tipo 2 se debe a la producción insuficiente de insulina de los islotes pancreáticos en el contexto de insulinorresistencia.[3]​ Esta última, que es la incapacidad de las células para responder adecuadamente a los niveles normales de insulina, se produce principalmente en los músculos, el hígado y el tejido adiposo.[26]​ En el hígado, la insulina normalmente suprime la liberación de glucosa. Sin embargo, debido a la resistencia a la insulina, el hígado libera inapropiadamente glucosa en la sangre.[4]​ La proporción entre la resistencia a la insulina y la disfunción de las células beta difiere entre los individuos. Algunos tienen principalmente resistencia a la insulina y solo un defecto menor en la secreción de insulina; y otros tienen una ligera resistencia a la insulina y fundamentalmente una falta de secreción de insulina.[3]

Otros mecanismos potencialmente importantes asociados con la diabetes tipo 2 y la resistencia a la insulina incluyen: aumento de la degradación de lípidos dentro de los adipocitos, resistencia y falta de incretina, altos niveles de glucagón en la sangre, aumento de la retención de sal y agua por los riñones y una regulación inadecuada del metabolismo por el sistema nervioso central.[4]​ Sin embargo, no todas las personas con resistencia a la insulina desarrollan diabetes, ya que también se requiere una disfunción de la secreción de insulina por los islotes pancreáticos.[3]

Diagnóstico

Criterios diagnósticos de la OMS[27][28]
Condición Glucemia de 2 horas Glucemia en ayunas HbA1c
Unidad mmol/l(mg/dl) mmol/l(mg/dl) mmol/mol DCCT %
Normal <7.8 (<140) <6.1 (<110) <42 <6.0
Glucemia en ayunas alterada <7,8 (<140) ≥6,1(≥110) y <7,0(<126) 42-46 6,0–6,4
Intolerancia a la glucosa ≥7,8 (≥140) <7,0 (<126) 42-46 6,0–6,4
Diabetes mellitus ≥11,1 (≥200) ≥7,0 (≥126) ≥48 ≥6,5

La definición de la Organización Mundial de la Salud de diabetes (tanto tipo 1 como 2) es de una sola lectura de glucemia elevada junto a síntomas, o valores elevados en dos ocasiones sin ellos, o también:[29]

  • glucosa plasmática en ayunas ≥ 7,0 mmol/l (126 mg/dl)
o

Una glucemia al azar de más de 11,1 mmol/l (200 mg/dL) en asociación con síntomas típicos[7]​ o una hemoglobina glicosilada (HbA1c) mayor que ≥ 48 mmol/mol (≥ 6,5 DCCT  %) es otro método de diagnóstico de la diabetes.[4]​ En 2009 un Comité Internacional de Expertos que incluía representantes de American Diabetes Association (ADA), la Federación Internacional de Diabetes (IDF) y la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD) recomendó que se debe utilizar un umbral de ≥ 48 mmol/mol (≥ 6,5 DCCT %) para diagnosticar la diabetes.[30]​ Esta recomendación fue adoptada por la Asociación Americana de la Diabetes en 2010.[31]​ Las pruebas positivas se deben repetir a menos que la persona presente síntomas típicos y glucemia > 11,1 mmol/l (> 200 mg/dl).[30]

El umbral para el diagnóstico de la diabetes se basa en la relación entre los resultados de las pruebas de tolerancia a la glucosa, la glucemia en ayunas o HbA1c y complicaciones como problemas de la retina.[4]​ Se prefiere la glucemia en ayunas o al azar sobre la prueba de tolerancia a la glucosa, ya que son más convenientes para las personas.[4]​ La HbA1c tiene las ventajas de que el ayuno no es necesario y los resultados son más estables, pero tiene la desventaja de que la prueba es más costosa que la medición de glucemia.[32]​ Se estima que el 20 % de las personas diabéticas en los Estados Unidos no saben que tienen diabetes.[4]

La diabetes mellitus tipo 2 se caracteriza por una alta glucemia en el contexto de resistencia a la insulina y deficiencia relativa de insulina.[2]​ En contraste con la diabetes mellitus tipo 1 en la que hay una deficiencia absoluta de insulina debido a la destrucción de células de los islotes páncreaticos y la diabetes mellitus gestacional que es un nuevo inicio de hiperglucemia asociado con el embarazo.[3]​ La diabetes tipo 1 y tipo 2 normalmente se pueden distinguir basándose en las circunstancias presentadas.[30]​ Si el diagnóstico es dudoso la prueba de anticuerpos puede ser útil para confirmar la diabetes tipo 1 y los niveles de péptido C pueden ser útiles para confirmar la diabetes tipo 2[33]​ (los niveles de péptido C son normales o altos en la diabetes tipo 2, pero bajos en la diabetes tipo 1).

Tamizaje

Ninguna organización importante recomienda el tamizaje universal de la diabetes ya que no hay evidencia de que un programa de este tipo mejore los resultados.[34]​ El United States Preventive Services Task Force (USPSTF) recomienda el tamizaje en adultos sin síntomas y presión arterial mayor que 135/80 mmHg.[35]​ Para aquellos cuya presión arterial es menor, la evidencia es insuficiente para recomendar a favor o en contra del tamizaje.[35]

La Organización Mundial de la Salud recomienda examinar los grupos de alto riesgo[34]​ y en 2014 la USPSTF está considerando una recomendación similar.[36]​ Los grupos de alto riesgo en los Estados Unidos incluyen: los mayores de 45 años, los que tienen un familiar de primer grado con diabetes, algunos grupos étnicos (como los hispanos, afroamericanos y nativos americanos), antecedente de diabetes gestacional, síndrome de ovario poliquístico, exceso de peso y condiciones asociadas con el síndrome metabólico.[7]​ La American Diabetes Association recomienda el tamizaje a aquellos con un IMC de más de 25 (o más de 23 en descendientes asiáticos).[37]

Prevención

El inicio de la diabetes tipo 2 se puede retrasar o prevenir a través de una nutrición adecuada y el ejercicio regular.[38][39]​Medidas intensivas en el estilo de vida pueden reducir más de la mitad del riesgo.[8][40]​ El beneficio del ejercicio se produce independientemente del peso inicial o su consiguiente pérdida de peso.[41]​ La evidencia para el beneficio de solo cambios en la dieta, sin embargo, es limitada:[42]​ hay cierta evidencia para una dieta rica en verduras de hoja verde[43]​ y la restricción del consumo de bebidas azucaradas.[14]​ En aquellos con intolerancia a la glucosa, la dieta y el ejercicio, ya sea solos o en combinación con metformina o acarbosa puede disminuir el riesgo de desarrollar diabetes.[8][44]​ Las intervenciones del estilo de vida son más eficaces que la metformina.[8]​ Mientras que niveles bajos de vitamina D están asociados con un mayor riesgo de diabetes, su corrección mediante suplementos de vitamina D3 no disminuye este riesgo.[45]

Control

El control de la diabetes tipo 2 se centra en intervenciones del estilo de vida, la reducción de otros factores de riesgo cardiovascular y el mantenimiento de la glucemia en el rango normal.[8]​ El National Health Service recomendó en 2008 la automonitorización de la glucemia en personas con diabetes tipo 2 recién diagnosticada,[46]​ sin embargo, su beneficio en los que no usan insulina en dosis múltiples es cuestionable.[8][47]​ El control de otros factores de riesgo cardiovascular, como la hipertensión, el colesterol alto y la microalbuminuria, mejora la esperanza de vida.[8]​ La disminución de la presión arterial sistólica a menos de 140 mmHg se asocia con un menor riesgo de muerte y mejores resultados.[48]​ El control intensivo de la presión arterial (< 130/80 mmHg) en oposición al estándar (< 140/85–100 mmHg) se traduce en una ligera disminución en el riesgo de derrame cerebral, pero no tiene efecto sobre el riesgo general de muerte.[49]

La disminución intensiva de glucemia (HbA1c < 6 %) en comparación con la estándar (HbA1c de 7-7,9 %) no parece cambiar la mortalidad.[50][51]​ El objetivo del tratamiento es típicamente una HbA1c de alrededor del 7 % o una glucemia en ayunas de menos de 6,7 mmol/L (120 mg/dL); sin embargo, estos objetivos pueden ser modificados previa consulta clínica profesional, teniendo en cuenta los riesgos particulares de hipoglucemia y la esperanza de vida.[7][52]​ Se recomienda que todas las personas con diabetes tipo 2 reciban regularmente un examen oftalmológico.[3]​ El tratamiento de la periodontitis en diabéticos puede dar lugar a una pequeña mejora en la glucemia.[53]

Estilo de vida

Una dieta adecuada y el ejercicio son los fundamentos de la atención diabética[7]​ y una mayor cantidad de ejercicio surten mejores resultados.[54]​ El ejercicio aeróbico conduce a una disminución de la HbA1c y mejora la sensibilidad a la insulina.[54]​ El entrenamiento de fuerza también es útil y la combinación de ambos tipos de ejercicio puede ser más eficaz.[54]​ También es importante una dieta para diabéticos que promueva la pérdida de peso.[55]​ Si bien el mejor tipo de dieta para lograr esto es controversial,[55]​ una dieta de bajo índice glucémico ha demostrado mejorar el control de la glucemia.[56]​ La educación culturalmente apropiada puede ayudar a las personas con diabetes tipo 2 a controlar su glucemia, por al menos seis meses.[57]​ Si los cambios en el estilo de vida en la diabetes leve no han resultado en una mejor glucemia luego de seis semanas, entonces debe considerarse el uso de medicamentos.[7]​ No hay evidencia suficiente para determinar si las intervenciones del estilo de vida afectan a la mortalidad en aquellos que ya tienen diabetes mellitus tipo 2.[58]

Medicamentos

Tabletas de metformina (500 mg).

Hay disponible varias clases de medicamentos antidiabéticos. La metformina generalmente se recomienda como tratamiento de primera línea, ya que hay cierta evidencia de que disminuye la mortalidad;[8]​ sin embargo, esta conclusión es discutida.[59]

Puede añadirse un segundo agente oral de otra clase o insulina si la metformina no es suficiente después de tres meses.[52]​ Entre otras clases de medicamentos se encuentran: sulfonilureas, tiazolidinedionas, inhibidores de la dipeptidil peptidasa-4, inhibidores de SGLT2 y péptido similar al glucagón tipo 1.[52]​ No existe diferencia significativa entre estos agentes.[52]​ La rosiglitazona, una tiazolidindiona, no ha demostrado mejorar los resultados a largo plazo a pesar de que mejora la glucemia.[60]​ Adicionalmente se asocia con mayores tasas de enfermedades del corazón y muerte.[61]​ La metformina no debe utilizarse en aquellos con severos problemas renales o hepáticos. Las inyecciones de insulina se pueden añadir a la medicación oral o usarse ​​solas.[8]

La mayoría de la gente no necesita inicialmente insulina.[3]​ Cuando se utiliza, se añade normalmente en la noche una formulación de acción prolongada, manteniendo la medicamentación oral.[7][8]​ Luego las dosis se aumentan para aumentar el efectuar y controlar la glucemia.[8]​ Cuando la insulina nocturna es insuficiente, dos dosis diarias pueden lograr un mejor control.[7]​ Las insulinas de acción prolongada glargina y detemir son igualmente seguras y eficaces,[62]​ y no parecen mucho mejor que la insulina protamina neutra Hagedorn (NPH), pero ya que son mucho más caras, no son costo-efectivas.[63]​ En embarazadas la insulina es generalmente el tratamiento de elección.[7]​ Los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) previenen la enfermedad renal y mejoran los resultados en diabéticos;[64][65]​ a diferencia de los antagonistas de los receptores de angiotensina II (ARA II).[65]

Cirugía

La cirugía de pérdida de peso en obesos es una medida eficaz para tratar la diabetes.[66]​ Muchos son capaces de mantener glucemias normales con poco o ningún medicamento después de la cirugía[67]​ y la mortalidad a largo plazo disminuye.[68]​ Sin embargo, la cirugía tiene cierto riesgo de mortalidad a corto plazo de menos del 1 %.[69]​ Los puntos de corte de índice de masa corporal para los que la cirugía es apropiada todavía no están claros.[68]​ Se recomienda que se considere esta opción en quienes son incapaces de mantener bajo control tanto su peso como su glucemia.[70]

Epidemiología

Prevalencia mundial de la diabetes en 2000. El promedio mundial fue de 28 cada 1000 habitantes.
     sin datos      ≤ 7.5      7.5–15      15–22.5      22.5–30      30–37.5      37.5–45
     45–52.5      52.5–60      60–67.5      67.5–75      75–82.5      ≥ 82.5

Para 2010, a nivel mundial a partir de se estimaba que había 285 millones de personas con diabetes tipo 2, lo que constituye cerca del 90 % de los casos de diabetes.[4]​ Esto equivale a aproximadamente el 6 % de la población adulta del mundo.[71]​ La diabetes es común tanto en el mundo desarrollado como en el de vías de desarrollo.[4]​ No obstante, sigue siendo poco común en los países subdesarrollados.[3]

Las mujeres parecen estar en mayor riesgo al igual que ciertos grupos étnicos,[4][72]​ como quienes del Sudeste Asiático, de las islas del Pacífico, los latinos y los nativos americanos.[7]​ Esto puede ser debido a una mejor sensibilidad a un estilo de vida occidental en ciertos grupos étnicos.[73]​ Considerada tradicionalmente una enfermedad de adultos, la diabetes tipo 2 se diagnostica cada vez más en los niños en paralelo con el alza de las tasas de obesidad.[4]​ La diabetes tipo 2 se diagnostica ahora con tanta frecuencia como la diabetes tipo 1 en los adolescentes de Estados Unidos.[3]

Las tasas de diabetes en 1985 se estimaron en 30 millones, lo que aumentó a 135 millones en 1995 y 217 millones en 2005.[5]​ Se cree que este aumento se debe principalmente al envejecimiento de la población mundial, una disminución del ejercicio y las crecientes tasas de obesidad.[5]​ Para 2010, los cinco países con el mayor número de personas con diabetes son la India (31,7 millones), China (20,8), los Estados Unidos (17,7), Indonesia (8,4) y Japón (6,8).[74]​ La Organización Mundial de la Salud la reconoció la diabetes como una epidemia global.[75]

Historia

La diabetes es una de las primeras enfermedades descritas.[76]​ Un manuscrito egipcio de c. 1500 a. C. menciona "vaciado demasiado grande de la orina".[77]​ Los primeros casos descritos se cree que son de diabetes tipo 1.[77]​ Los médicos indios alrededor del mismo tiempo identificaron la enfermedad y la clasificaron como madhumeha u orina miel al notar que la orina atraía a las hormigas.[77]​ El término "diabetes" o "pasar a través de" fue utilizado por primera vez en 230 a. C. por el griego Apolonio de Memphis.[77]​ La enfermedad era rara durante el tiempo del Imperio Romano, Galeno comentó que solo había visto dos casos durante su carrera.[77]

La diabetes tipo 1 y tipo 2 fueron identificados como condiciones separadas por primera vez por los médicos indios Sushruta y Charaka entre 400-500 d. C. con el tipo 1 asociado con la juventud y el tipo 2 con el sobrepeso.[77]​ El término "mellitus" o "de miel" fue introducido por el británico John Rolle a finales de 1700 para distinguirla de la diabetes insípida, que también se asocia con la micción frecuente.[77]​ El tratamiento efectivo no se desarrolló hasta la primera mitad del siglo XX, cuando los nobeles canadienses Frederick Banting y Charles Best descubrieron la insulina entre 1921 y 1922.[77]​ Esto fue seguido por el desarrollo de la insulina de acción prolongada (NPH) en la década de 1940.[77]

Véase también

Referencias

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