Las escaramuzas fronterizas entre Irán y Pakistán son unas escaramuzas activas menores libradas entre Irán y Pakistán en el 16 de enero de 2024. Irán llevó a cabo una serie de ataques con misiles en Pakistán, afirmando que los objetivos eran miembros de Jaish ul-Adl, ubicados en la provincia paquistaní de Baluchistán. Dos días después, el 18 de enero, el Pakistán lanzó ataques con misiles de represalia contra el Irán, afirmando que los objetivos eran el Ejército de Liberación de Baluchistán y el Frente de Liberación de Baluchistán, situados en la provincia iraní de Sistán y Baluchistán.[1]
La frontera entre Irán y Pakistán, que se extiende a través de Sistán y Baluchistán en Irán y Baluchistán en Pakistán, enfrenta desafíos significativos debido a su alta porosidad, lo que la hace susceptible a un amplio contrabando y actividades terroristas, orquestadas principalmente por insurgentes baluchis. A pesar de mantener una relación generalmente positiva, ambos países se han acusado mutuamente de albergar terroristas y de no garantizar la seguridad en sus respectivos lados de la frontera. Estas preocupaciones impulsaron el establecimiento de la barrera fronteriza entre Irán y Pakistán, y la construcción de las fortificaciones iraníes comenzó en 2011 y de las fortificaciones paquistaníes en 2019.[2][3]
El 18 de enero, el Pakistán lanzó un ataque de represalia llevado a cabo por la Fuerza Aérea del Pakistán contra siete objetivos de los grupos militantes del Ejército de Liberación de Baluchistán y el Frente de Liberación de Baluchistán en la provincia iraní de Sistán y Baluchistán. [4][5]Funcionarios iraníes afirmaron que nueve ciudadanos extranjeros murieron, incluidas tres mujeres y cuatro niños.[6]