Usuario:DanaeBB/Arrecife de Coral del Amazonas

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El arrecife de coral del Amazonas es un arrecife coralino que se encuentra en la desembocadura del río Amazonas, causa por la que ha recibido dicho nombre; abarca 9, 500 kilómetros cuadrados, recorre el borde de la plataforma continental sudamericana, y se extiende desde el extremo sur de la Guayana Francesa hasta el estado brasileño de Maranhão. En abril del 2016, un equipo internacional de científicos americanos y brasileños de la Universidad de Georgia y la Universidad Federal de Río de Janeiro, descubrió un nuevo arrecife de coral en el Océano Atlántico. Este descubrimiento lo dieron a conocer publicándolo en la revista Science Advances[1].

El Amazonas es un río de superlativos, lleva mucha más agua que cualquier otro río en el mundo, con alrededor del 16% de todo el agua fluvial discurriendo a través de su delta de 320 kilómetros de anchura[2]​. Fluye a través de América del Sur, desde los Andes en Perú hasta Brasil, en donde desemboca en el océano Atlántico.  Sus afluentes nacen en Brasil, Perú, Ecuador, Colombia, Bolivia, Venezuela, Guyana, Guyana Francesa y Suriname. Tiene una extensión de 6, 151, 000 kilómetros cuadrados y alberga a más de 20 millones de seres vivos[3]​.

Argumento sobre su existencia[editar]

Ha sido extraordinario este hallazgo, debido a que los arrecifes de coral sólo se habían encontrado en aguas de poco tráfico, transparentes y con penetración solar directa; los corales necesitan de la luz solar para que las algas unicelulares llamadas zooxantelas hagan fotosíntesis y los nutran. Otra razón por la que era altamente improbable la existencia del arrecife en el Amazonas es por las condiciones fisioquímicas del agua, ya que los científicos habían encontrado corales solamente en aguas saladas. El río Amazonas tiene áreas donde el agua dulce se mezcla con el agua salada del océano alterando al PH, por lo que existían huecos vacíos de corales al Oeste del Atlántico[4]​.

Nils Asp, investigador en la Universidad Federal de Pará, opina que este único arrecife tiene un gran potencial de albergar nuevas especies y es de suma importancia para la economía de las comunidades pesqueras locales. Los investigadores también se percataron de que el arrecife no ha sufrido de blanqueo coralino, término utilizado para referirse a la despigmentación de los corales pétreos por la pérdida de las algas zooxantelas. El blanqueo coralino es una de las consecuencias del calentamiento global, la cual ya ha afectado a otros arrecifes como a la Gran Barrera de Coral, el arrecife más grande del mundo[5]​.

Fauna marina[editar]

En el inusual sistema marino hallaron microbios microsintéticos que producen energía a partir de minerales como el nitrógeno que generan biomasa, debido al proceso conocido como quimiosíntesis. Esta biomasa se convierte en una especie de combustible que nutre los corales y permite la formación de arrecifes. También se descubrió que la parte sur del arrecife sí recibe luz solar durante nueve meses al año, lo que permite el proceso de fotosíntesis. La sección norte, que no recibe luz durante seis meses, es discorde con los seres vivos que alberga ya que esta zona está dominada por esponjas y criaturas carnívoras. Dentro del arrecife coralino del Amazonas se han encontrado diversas criaturas que incluyen a más de 60 especies de esponjas, 73 especies de peces, langostas y estrellas de mar[4]​.

El coral amenazado[editar]

A pesar del temprano descubrimiento del arrecife de coral, ya se han encontrado hallazgos de los peligros que corre. El mantenimiento de los arrecifes es muy delicado, el cual se irrumpe por la elevada temperatura de los océanos, causada por el calentamiento global. Ésta rompe la simbiosis del coral con sus algas microscópicas y al perderlas, el arrecife pierde su principal fuente nutritiva; si esta condición se prolonga, puede morir. Otra amenaza, son las perforaciones petrolíferas en la región, hasta el momento se han perforado 95 pozos, de los cuales 27 han sido abandonados por incidencias mecánicas[6]​.

No está garantizada la conservación del arrecife, porque el gobierno de Brasil está estudiando la posibilidad de establecer en la zona un nuevo enclave para la extracción de petróleo crudo. Los científicos apenas han comenzado a estudiar el arrecife y ya hay un gran número de empresas que planean realizar sondeos en busca de petróleo. Empresas como Total y BP podrán empezar a desarrollar sus planes de actividad en la zona si se lo permite el gobierno, se estima que las reservas pueden aproximarse a los 20 mil millones de barriles. Los grupos de activistas esperan que el gobierno ratifique el acuerdo como ayuda en contra del cambio climático [6]​.

Involucración de Greenpeace[editar]

La desembocadura del Amazonas es el hogar de varias poblaciones locales y de más de 80 comunidades indígenas Quilombola, que dependen de los recursos pesqueros para desarrollar su actividad económica. El territorio también conforma parte del hábitat de animales en estado vulnerable de conservación como el manatí del Caribe, la tortuga terecay y la nutria gigante. Las razones anteriores mencionadas son el propósito por lo que la asociación activista Greenpeace declara que defenderá al arrecife por medio de campañas futuras [5]​. El 24 de enero, comenzó una expedición al arrecife planeada por Greenpeace y formaron parte de ella investigadores brasileños y activistas ambientales, a bordo del navío “Esperanza”. Partieron desde Porto de Santana, que se encuentra en el estado brasileño de Amapá, y culminó el 10 de febrero. Esta expedición formó parte de la campaña “Defienda los corales del Amazonas”, la cual intenta concientizar sobre los peligros de la explotación prolífera en la región para la conservación del bioma, apenas siendo el comienzo de las campañas que planea la asociación Greenpeace.[7]​.

Durante los 18 días de la investigación, se realizaron ocho inmersiones a las profundidades del río; gracias a la ayuda de un robot acuático, Greenpeace ha conseguido las primeras imágenes del arrecife. Después de la exploración los investigadores piensan que el tamaño del arrecife puede ser incluso entre tres y cuatro veces mayor de lo que habían calculado. Otro descubrimiento fue la existencia de un paredón de piedra de más de 20 kilómetros de extensión en el fondo del río y entre los arrecifes. Los científicos pretenden continuar con las investigaciones para tener más conocimiento de este nuevo bioma, mas será difícil debido a las aguas turbias del Amazonas[8]​.

Referencias[editar]

  1. Moura, R. & Amado-Filho, G. (22 de abril de 2016). «An extensive reef system at the Amazon River mouth.» (en inglés). Consultado el 4 de abril de 2017. 
  2. Harris, R. & Hutchison, P. (abril de 2011). s+harris&hl=es&sa=X&ved=0ahUKEwin0KGQhrvSAhVQ6mMKHSRiAYIQ6AEIGzAA#v =onepage&q=amazonas%20harris&f=false «Amazonas.». Google Books. Alhena Media. ISBN 978-84-92963-55-3. Consultado el 4 de abril de 2017. 
  3. Sparkia, Roy (1987). El Amazonas. Edvisión. ISBN 968-13-1764-5. 
  4. a b Vidal, J. (22 de abril de 2016). «Huge coral reef discovered at Amazon river mouth.» (en inglés). The Guardian. Consultado el 4 de abril de 2017. 
  5. a b BBC Mundo (25 de abril de 2016). «El inesperado arrecife de coral de 1.000 kilómetros descubierto en la boca del Amazonas.». Consultado el 4 de abril de 2017. 
  6. a b Rodríguez, H. (1 de febrero de 2017). «Las primeras imágenes del arrecife de coral del Amazonas.». National Geographic. Consultado el 4 de abril de 2017. 
  7. Macapá, B. (18 de febrero de 2017). «Posibilidad de nuevas especies en arrecife de coral amazónico.». La Jornada. Consultado el 4 de abril de 2017. 
  8. Sorgato, V. (26 de abril de 2016). «El inesperado descubrimiento de un arrecife de coral en el río Amazonas». El Comercio. Consultado el 4 de abril de 2017.