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Filiberto Delorme[editar]

Filiberto Delorme (1567).- Filiberto propuso en el capítulo VIII del libro IX de su Arquitectura, entre diversos medios de impedir que las chimeneas den humo, otro remedio e invención contra los humos: Por otra invención sería muy útil tomar uno o dos globos de cobre de 5 o 6 pulgadas de diámetro si se quiere, y haciendo un pequeño agujero por encima llenarlas de agua y colocarlas en la chimenea a la altura de cerca de 4 o 5 pies para que puedan calentarse cuando llegue a ellos el calor, y por la evaporación causará tal viento que por grande que sea el humo será arrojado por arriba y este remedio ayudará también para que la madera puesta en el fuego forme llama y se encienda, como lo demuestra Vitruvio en el capítulo VI de su primer libro. Algunos podrán decir que las eolípilas no podrán producir aire por mucho tiempo, a lo cual respondo, que cuanto mayores sean durará más el viento, como también dándolas un calor templado por debajo. Y cuanto mayor fuego haya para calentarlas soplarán con mayor vehemencia y fuerza, pero el agua también se evaporizará más pronto, por lo que será útil tener dos o tres más si se quiere, para que cuando no sople una, se ponga en su lugar otra . (se trata en esta cita de una aplicación muy indirecta de la fuerza motriz del vapor, pero esta aplicación se renovó y a mediados del siglo XIX se empleó produciendo resultados de gran importancia para activar los hornillos que rodean las calderas).[1]

Jacques Besson[editar]

Jacques Besson (1569).- Según F. Arago en una de las obras de Jacques Besson impresa en el año 1569 se halla un ensayo de determinación de los volúmenes relativos del agua y del vapor y se trata más de una experiencia física que de una aplicación mecánica, pero acontecimiento notable en la historia de la ciencia, uno de los autores, Jacques, más notable del siglo XVI, con su obra: Teatro de instrumentos y figuras matemáticas y mecánicas, Leon de Francia, Horacio Cardon, 1602[2]​ la primera publicación que se hizo de este género y se imitó o reprodujo muchas veces posteriormente y las láminas se grabaron en cobre antes de que hubiese aparecido este metal y el privilegio, es de unos años antes de 1569 (otras obras interesantes de Bresson: Arte de encontrar las aguas subterráneas; Arte de estraer aceites y aguas de los medicamentos simples; Cosmólogo; Compás euclidiano)

Eolípila aplicada al asador[editar]

  • Stuart, en su obra citada Historia descriptiva.
  • Thomas Young, autor de A course of lectures on natural philosophy and the mecanical arts, London, 1807, 2 volúmenes (bibliografía-ciencias-aplicación de las máquinas).
  • Los citados:
    • Cardan describe en su obra De Rerum varietate, 1557, un asador movido por el humo, como una máquina usada en Milán en su tiempo.
    • Leonardo da Vinci.- En los manuscritos de Leonardo contienen el croquis e indicación de la máquina citada anteriormente (Essai sur les ouvrages physico-mathematiques de Leonardo de Vinci../ G.B. Venturi, París, Duprat, 1797; reeditada en el año 1924)[3]​.

Siglo XVII[editar]

Juan Bautista Porta (1601) y Juan Escribano (1608)[editar]

Giambattista Della Porta, físico distinguido, publicó en la ciudad de Italia Nápoles, con el título Pneumaticorum libri tres:.. (edición más moderna: Napoli, 2008), una obra del género de la Herón de Alejandría, citada anteriormente y un español, Juan Escribano, publicó 7 años después una traducción italiana de dicha obra (Y tre libri Spirituali, Nápoles en 4ª) y en una dedicatoria dirigida al autor, Escribano anuncia que añadió a su traducción algunos textos que oyó al mismo Porta.

Valoración de la obra de Porta: edición italiana de Escribano[editar]

  • Porta sabía que el vapor de agua puede comprimir un líquido como si fuese aire.
  • Hacerlo subir sobre su nivel.
  • Dice que el cañón de salida pasa a una corta distancia de la cobertera de la caja.
  • Su único objeto era determinar prácticamente y por un medio cuyos defectos es inútil señalar aquí, los volúmenes relativos de una cantidad dada de agua y del vapor en que la transforma el calor.

Florencio Rivault (1605)[editar]

El aerotono de Ctesibio[4]​ se hallaba completamente olvidado cuando un artesano de Lisieux, llamado Marin Bourgeois, lo inventó de nuevo a principios del siglo XVIII y se halla la descripción del fusil de viento de Bourgeois en la obra del gentilhombre de Cámara de Enrique IV de Francia y traductor del griego al francés, F. Rivault (1571-1616): Les elements de l'artillerie..., París, chez Adrien Beys, 1605[5]​, profesor de matemáticas de Luis XIII de Francia y algunas palabras suyas de la segunda edición de su obra citada de artillería del año 1608 que se aumentaron con: La invención, descripción y demostración de una nueva artillería, que no se carga más que con aire y agua pura, , y tiene sin embargo una fuerza increíble, de una especie más de una pólvora de cañón, es decir, las citadas eolípilas que revientan con estruendo cuando se impide la salida del vapor y sigue: El efecto de la rarefacción del agua es capaz de atemorizar a los hombres más valientes en el accidente de los terremotos. El agua que corre en las cavernas de la Tierra, en la primavera y principalmente en otoño, ...

Salomón de Caus (1615)[editar]

Salomón de Caus (1615).- Según F. Arago, cabe el honor para Caus el haber inventado una verdadera máquina de vapor propia para obtener achicamientos, en su obra de 1615: Les raisons des forces mouuantes,.., Fráncfort; Ian Norton, 1615, 3 volúmenes[6]​.

Valoración de la máquina de Caus[editar]

  • Probó que el fluido que se escapa de la eolípila no es aire sino vapor de agua, cuya potencia mecánica demostró al mismo tiempo; y por esos la eolípila de Caus debe considerase como uno de los puntos de partida de la máquina de vapor
  • Sabía que el vapor de agua condensado da un volumen de agua enteramente igual al que ha producido este vapor
  • Sabía además que la presión del vapor formado es bastante fuerte para hacer salir con ímpetu de la vasija por el orificio CD el agua no vaporizada todavía
  • El teorema V contiene una aplicación, teórica al menos, de la fuerza expansiva del vapor

Giovanni Branca[editar]

G. Branca, ciudadano romano, ingeniero y arquitecto, publicó en 1629 un pequeño volumen en 4ª titulado La maquine:.../ del Sig. G. Branca, Roma: I. Martuci, 1629[7]​ dividida en tres partes:

  • Contiene la primera cuarenta máquinas diversas.
  • La segunda, catorce máquinas destinadas a elevar el agua
  • La tercera. veintre tres máquinas en las cuales el aire juega el papel principal

Valoración de su máquina: fig. 25 de su obra[editar]

  • Uso verdaderamente industrial
  • Ha dibujado una máquina para pulverizar cualquier sustancia y este es un adelanto más que debe consignarse en la historia de la ciencia[8]
  • Pero no pertenece a Branca la idea de mover una rueda por medio del vapor, quien tampoco reclamó el honor de su invención (la idea estaba indicada antes en «Récréation matémathiqués»: Récréations mathematiques. Composées des plusieurs problemes., Roven: Ch. Osmont, 1628)

Religiosos[editar]

Jean Leurechon[editar]

Jean Leurechon.- Jesuita y profesor de matemáticas en Pont-à-Mousson, Francia, que publicó un libro bajo el título Récréation mathématique,..., París: Rolet Boutonné, 1626[9]​ el cual merece bajo muchos aspectos a pesar de la crítica acerba que de él se hizo, como las del hábil geometra Claude Mydorge[10]​ o el severo juicio de Jean Etienne Montucla, autor de Histoire des mathématiques, París, 1799, 4 volúmenes (reeditada en 1960)[11]​ y sin embargo contiene ciertos pasages que no deben desdeñarse para la historia de la ciencia y entre otras cosas curiosas, las siguientes:

  • Se encuentra en él la primera idea del telégrafo eléctrico, muy incompleta en cuanto a los medios de ejecución, pero muy clara en cuanto al objeto a que se refiere
  • El pasage relativo al vapor ofrece bastante interés:
    • De las eolípilas o bolas para soplar el fuego: Estos vasos son de arena o de otra materia semejante que pueda endurecerse al fuego: tiene un pequeño agujero muy estrecho por el cual se les llena de agua, colocándolos después delante del fuego: ningún efecto se observa si no se han calentado, pero tan pronto el calor los penetra, rarificada el agua sale con un silbido impetuoso y de una fuerza prodigiosa. Es digno de ver como ese solplo enciende los carbones y consume los troncos con un gran ruido. Vitruvio demuestra con esos instrumentos[12]​ que el viento no es otra cosa más que cierta cantidad de vapores y exalaciones agitadas con el aire por rarificación y condensación. Nosotros podemos sacar otra consecuencia para manifestar que un poco de agua puede engendrar gran cantidad de vapor y de aire, porque un vaso de agua echado en esas eolípilas soplará durante casi una hora, despidiendo vapores que ocuparán un espacio mil veces mayor que su volumen. En cuanto a la forma de esos vasos, no todos siguen un mismo sistema: algunos lo hacen en forma de bolas, otros en forma de cabeza, a la manera que se acostumbra a pintar a los vientos: unos en figura de pera, como si se las pusiera a cocer al fuego cuando se las aplica a soplar, y entonces el mango de ella se ahueca en forma de tubo, haciendo al extremo un agujero ta pequeño como la cabeza de un alfiler.[13]
    • Como se puede cargar un cañón sin pólvora.- La solución que da el autor consiste en llenar el alma del cañón con agua y aire comprimidos, y emplear en vez de taco, un tarugo que ajusta perfectamente, delante del cual se coloca la bala. Teniendo bien cerrado el oído se hace fuego, y para mantener la carga se introduce en él una pértiga hasta el momento que se quiere disparar: Entonces buscanso el aire y el agua mayor espacio, y teniendo medio de ocuparlo en efecto , empujan con gran fuerza el taco y la bala, produciendo casi el mismo efecto que si la carga fuera de pólvora. Sobre este cañón recibió el Padre Leurechon las siguientes críticas:
      • Según el citado Mydorge: Nos propone aquí un buen medio para ahorrarnos la pólvora y un buen auxilio para sustituirla. Se dice que el agua y el aire encerrados en el cañón, y calentados, producen el mismo efecto que la pólvora puesta en contacto con el fuego. Pero el que desee comparar la violencia de uno y otro medio, y conocer su diferencia, puede tomar dos eolípilas semejantes a las que dejamos descritas, llenar una de agua y otra de pólvora, calentarlas hasta que produzcan su efecto, y llegará a conocer su resultadp
      • El cañón que describe, había sido presentado 16 años antes por el citado Rivault, y el procedimiento que indica para poner en funcionamiento el cañón, es muy inferior al mecanismo diseñado por Leonardo da Vinci antes de 1519
Valoración de la obra[editar]
  • Según la primera cita del Padre Leurechon el vapor ocupa una extensión mil veces más considerable que el volumen del agua que lo ha producido, determinación muy inexacta, pues a la simple presión de la atmósfera, el agua en estado de vapor ocupa un volumen mil setecientas veces más considerable que su volumen primitivo, pero es el primer ensayo en que se encuentra la señal para expresar la relación que Porta se propuso determinar, y que merece ser anotada.
  • En el párrafo V se dice que otros utilizan un tubo sencillo de plomo en donde colocan una pequeña bolita que van saliendo a medida que los vapores encuentran salida y es el verdadero origen de los cañones a vapor.
  • En el párrafo VI, habla de los molinetes o cosas semejantes que dan vueltas por el impulso de los vapores, primera indicación conocida del uso del vapor para dar impuslo directo a un mecanismo de rotación continua.
  • Cuando no se preucupa de reinvidicar la parte que le pertenece de su invento y describe una invención sin presentarla como suya, existe una certidumbre casi completa de que no ha inventado lo que anuncia y guarda silencio sobre el autor de la invención y discurre sobre ella como una cosa conocida y puesta en práctica en su época; por tanto no aparece a los ojos de algunos como un inventor[14]

Athanasius Kircher (1641)[editar]

El jesuita y profesor de física y matemáticas en el Colegio Romano, publicó una obra en 1641, Athanasii Kircheri...Magne sives. De arte magnética opus tripartitum.., en la que se halla consignada la idea, que muchos atribuyen a Savery, de haber separado la caldera del recipiente en que ejerce su presión el vapor.

Valoración de su obra[editar]
  • No tenía la instrucción de Porta y mucho menos de la de Salomón de Caus, en lo relativo a la causa verdadera de la ascensión del agua.
  • Sin embargo su aparato merece ser citado por lo siguiente: se encuentra el vapor empleado a la vez como fuerza motriz y como producto de un vaso diferente de aquel que contiene el líquido que se quiere elevar.

Gaspar Schott (1657)[editar]

Gaspar Schott, discípulo de Kircher, en una curiosa obra titulada P. Gasparis Schotii...Mechanica hydraulico-pneumatica,.., Francofurti and M., H. Pigtin, 1657[15]​ hace lo siguiente:

  • Reproducir íntegramente la descripción dada por su maestro.
  • Presenta la misma figura con modificaciones poco importantes.

J.J.W. Dobrzenski (1657)[editar]

En 1657, Jacobus Joannes Wenceslau Dobrzenski, jesuita de Bohemia, publicó un libro poco conocido, en Ferrara, por Baptistam de Marestis, titulado Nova et amaenior de admirando fontium genio..,[16]​ en el que describe un aparato que difiere del aparato del Padre Kircher en la forma, aunque el fondo sigue siendo absolutamente el mismo.

Valoración de la obra[editar]
  • El texto siempre atribuye al enrarecimiento del aire gran parte de este fenómeno, y recomienda que se llene el vaso inferior hasta la mitad únicamente y sine embargo, admite también un efecto debido al vapor
  • Todo ello se halla a gran distancia de la clara idea emitida por Salomón de Caus en su teorema V. y muy inferior sobre todo a las bellísimas fuentes y surtidores de este hábil ingeniero

El marqués de Worcester (1663)[editar]

Edward Somerset, 2º marqués de Worcester.

Hacia el fin del reinado de Carlos II de Inglaterra, en 1663, aparece en Londres una obra titulada A Century of inventions, por Eduardo Somerset, Marqués de Worcester[17]​, escrito en un estilo muy oscuro y es según el autor: un catálogo descriptivo de los nombres de todas las invenciones que he podido ahora acordarme de haber hecho o perfeccionado, habiendo pedido mis primeras notas y en el artículo que se refiere a la invención 68 ª, se considera por algunos autores (sobre todo ingleses) como un título que asegura a Worcester a ser tenido por inventor de la primera máquina de fuego: Un medio muy admirable y muy poderoso para hacer subir el agua con auxilio del fuego, no para elevarla para aspiración, porque esto debe operarse, como dice el filósofo, intra sphaeram activitatis, y solo tiene lugar hasta cierta distancia, pero este medio no reconoce límites si son muy fuertes los vasos. Tomó un cañón entero[18]​ lo llenó de agua hasta las tres cuartas partes, cierro a torno la boca y el oído y lo expongo a un fuego constante: al cabo de veinticuatro horas estalla la pieza con gran ruido. Habiendo encontrado el medio de hacer mis vasos de tal suerte que se consoliden por la fuerza que existe en su interior y hallándose de manera que puedan llenarse una después de otro, he visto saltar el agua, como una fuente continua, a la altura de cuarenta pies.

También escribió Worcester un pequeño volumen en 4ª de 22 páginas titulado An exact and true definition, o Verdadera y exacta definición de la máquina hidraúlica más sorprendente inventada por el muy honorable Edward Somerset, lord marqués de Woscester, conteniendo una enumeración de los servicios maravillosos que puede hacer el aparato, escrita de una manera tan difícil como A Century of inventions y también refiere el volumen un acta del Parlamento inglés que concede al marqués el monopolio de esta máquina, reservando al rey la décima parte de sus beneficios (más cuatro miserables versos de su cosecha, elogiando la invención,; después el Exegi monumentum de Horacio; el Barbara pyramidum sileat de Marcial; y por último algunos versos latinos e ingleses escritos por James Rollock, viejo admirador de su señoría, en alabanza del noble inventor)

Valoración de la obra de Woscester[editar]

  • Para muchos autores, sobre todo ingleses, el creador de la primera máquina de fuego.
  • Para otros, poca gracia tiene el presentarse como inventor, cuando por todo título se trae una patente acompañada de una descripción oscura.
  • Robinson en el artículo Steam engine de la Enciclopedia Británica, 1830-42, 21 volúmenes, dejó escrito lo siguiente: Era, a lo que parece un hombre sabio, profundo e ingenioso; pero sus descripciones o relatos de sus inventos más bien parecen hechos para sorprender que para ilustrar al público, rayando en estravagantes los elogios que hace de su utilidad e importancia.
  • Cuando se trató de formar el aparato indicado por el Century of inventions, no pudieron ponerse de acuerdo ni dos siquiera de los sabios ingleses que se manifestaban más ardientes partidarios de Woscester: por la razón muy sencilla de que la descripción de la 68.ª invención del lord inglés carece absolutamente de claridad.
  • Cuando se trata de reproducir la máquina del Marqués de Woscester, débese ceñirse a lo que dice el autor y nada más y R. Stuart en su obra Historical and descriptive anecdotes of steam-engines ..., London, 1829, 2 volúmenes, presenta dos soluciones a dicha cuestión:
    • Una de ellas tomada de John Millington en su obra An epitome of the elementary principles of mechanical philosophy..., London, 1830, con ligeras modificaciones.[19]
    • Para explicar satisfactoriamente la enrrevesada descipción de su obra , reunió dos aparatos de Salomón de Caus, los cuales producen por su juego alternativo una corriente continua; y sin embargo según Stuart: los derechos de Woscester como inventor solo descansan en la relación que él mismo ha hecho de la utilidad y maravillosas propiedades de sus invenciones, debiendo nosostros graduar la confianza que merece su propio aserto por la reputación del hombre leal y sincero de que goze el marqués Pero esta reputación, si el retrato que ha hecho de él, no debemos creer una sola de las palabras,...

Denis Papin (1681)[editar]

Diseño de Denis Papin de una máquina de pistón-y-cilindro (1680)

Del físico francés y profesor de matemáticas en la universidad de Marburgo, Alemania Denis Papin: caldera[20]​ y válvula de seguridad.

Denis Papin publicó en Londres una obra titulada A new digester or engine.., H. Bonwicke, 1681 (edición contemporánea: Saint-Louis: Mallickrodt Chemical Works, 1966), traducida al francés en el año 1682 con el título La maniere d'amolir les os,..., París: E. Michallet, 1682 y en uno y otro libro encuéntrase el mecanismo conocido actualmente con el nombre de válvula de seguridad[21]​ y que tan importante papel desempeña en las máquinas de vapor[22]​.

Valoración de la válvula de seguridad de Papin[editar]

  • Es una de las más útiles e ingeniosas concepciones suyas, de ese hombre de genio tan largo tiempo olvidado.
  • Abre una nueva era y de él veremos salir sucesivamente la idea de los órganos más importantes de las máquinas modernas.
  • Se trata de medir la presión del vapor en un recipiente (p.ej. una marmita) cilíndrico bien cerrado, de manera que no pueda ir esta presión más allá del punto necesario a la cocción de las suntancias sometidas a la acción del vapor.

Samuel, el Caballero Morland (1683)[editar]

Sir Samuel Morland, matemático e inventor de Gran Bretaña, publicó en París en el año 1685 Élevation des eaux par toute sorte de machines.. e (Elevación de las aguas por toda clase de máquinas....) innmediatamente de una carta dedicatoria dirigida a Luis XIV de Francia, aparece un prefacio al lector, en el que se indica de modo muy suscinto el uso del fuego como fuerza motriz[23]​: ..he tenido al fin la dicha de haber encontrado una especie de émbolo y de cuerpo de bomba enteramente nuevos y muy sencillos, con un movimiento particluar y eyeloeclípctico, por cuyo medio se puede someter muy fácilmente la elevación de las aguas a medida, peso y equilibrio, y obligarlas de una vez y sin descanso de ninguna especie subir hasta la cima de la motaña más elevada, a razón de tantos moyos[24]​ por hora y pulgada, según la fuerza motriz dada[25]​ en un tubo sencilllo de plomo, colocado sobre la superficie de la tierra...

En el Museo Británico existe un manuscrito muy notable de Morland, el cual contiene las siguientes palabras: Evaporada el agua por la fuerza del fuego, necesitan desde luego sus vapores un espacio mayor del que anteriormente ocupaba el líquido, y más bien que permanecer siempre aprisionados, harían saltar en pedazos un cañón de artillería. Pero bien dirigidos esos vapores según las leyes de la estática, y reducidos por ciencia a medida, peso y equilibrio, conducen la carga con la misma facilidad que pudieran hacerlo unos buenos caballos. Esta innovación es de gran importancia para el género humano, particularmente en lo relativo a la elevación de las aguas: para eso se ha formado la tabla adjunta, que manifiesta el número de libras que pueden ser elevadas mil ochocientas veces por hora, a una altura de 6 pulgadas, con cilíndros llenos de agua hasta la mitad.. y el párrafo concerniente al vapor ocupa cuatro páginas en el manuscrito, el cual lleva por título particular Les principes de la nouvelle force du feu,...

La Biblioteca Imperial de Francia poseía en el siglo XIX, una copia del tratado de LÉlevation des Eaux (Élevation des eaux pour tote sorte de machines réduite a la mesure..., París: C. Martin, 1685, en la BnF), que parece que Morland presentó a Luis XIV, a juzgar con el cuidado que ha sido esrcita y adornada con las armas reales, pero solo contiene según Georges-Bernard Depping (Biografías universales, art. Morland)[26]​ los dos primeros capítulos de la copia impresa, faltando el suplemento relativo al uso del vapor.

Valoración de la obra de Morland[editar]

  • Ingeniero muy distinguido:
    • De fecunda imaginación
    • Como expone los resultados obtenidos de sus investigaciones
  • Los números de que usa para expresar los volúmenes relativos del agua y de un peso igual de vapor, se apartan muy poco de la verdad y es notable esta circunstancia teniendo en cuenta el estado de las ciencias en 1687

Otra vez Denis Papin (1690-1695)[editar]

Primera máquina de vapor de pistón y cilindro, citada en:

  • Actas de Leipzig, 1680.- Las Actas contienen una Memoria latina, cuyo título traducido al francés posteriormente por el mismo Papin es el siguiente: Nouvelle maniere de produire a peu de frais des forces mouvantes estrément grandes (Nuevo modo de producir con pequeño gasto de fuerzas unos movimientos sumamente considerables) y la descripción de algunas piezas de dicha máquina, es la siguiente:
    • Un tubo igual de uno a otro extremo.
    • Émbolo perfectamente ajustado a este tubo.
    • Mango del émbolo.
    • Una barra de hierro.
    • Un resorte que oprime la barra de hierro con el objeto que se introduzca en la escotadura.
    • Pequeño agujero en el émbolo por el cual puede salir el aire de un tubo, cuando se baja el émbolo por primera vez.
  • Acta eruditorum, de 1688 y 1690
  • El verdadero antagonista de Papin fue el doctor Robinson, amigo de Watt, autor apreciado de un tratado de física en cuatro tomos en 8.º, impreso en Edimburgo en 1822 y el tomo segundo de esta página contiene un artículo de 184 páginas sobre el vapor y las máquinas de vapor (steam engine), seguido de un apéndice de Watt y en la página 49 se lee: Papin no era físico ni mecánico
  • Roberto Stuart en su citada A descriptive history of the steam engine, London, 1825,[27]​ dice lo siguiente: En toda la discusión a que se ha dedicado el doctor Robinson sobre el invento de Papin, su franqueza y generosidad acostumbradas parecen haberle abandonado
  • Obras sobre Papin,[28]

Pascal y Torricelli[editar]

Los notabilísimos trabajos de Blaise Pascal y Evangelista Torricelli, verdaderos fundadores de la física moderna , son los que derramaron vivísima luz sobre las nociones de sus predecesores, con el admirable descubrimiento del barómetro, preparando el terreno que muy pronto habría de fecundar el citado Papin, a quien se puede considerar como el precursor de las máquinas de fuego:

  • Tuvo la idea de emplear el vapor de agua para producir el vacío por medio de la condensación.
  • La citada válvula de seguridad de que proveyó su marmita, uno de los órganos más importantes de la máquina de vapor.

Valoración de la máquina de Papin[editar]

  • Esta máquina fue llamada posteriormente atmosférica, porque pone en juego la presión de la atmósfera.
  • En los aparatos de Herón, de Salomón de Caus, de Branca, ejercía el vapor su acción de modo muy diferente; aquí obra en un cuerpo de bomba contra un émbolo movible, que se mueve con muy poco rozamiento, alternativamente de abajo arriba y de arriba abajo (principio de la máquina de vapor como se utilizó posteriormente).
  • Papin conocía perfectamente las causas físicas de la fuerza de su aparato: Como el agua tiene la propiedad, transformada por el fuego en vapor, de tener, como el aire, fuerza elástica, y de condensarse de repente por el frío, sin que le quede rastro alguno de esa fuerza, he creído que no sería difícil construir máquinas en las cuales, por medio de un calor y frío moderados, hiciera el agua un vacío perfecto...
  • No con menos claridad había comprendido la fuerza que era dado prometerse de ese nuevo motor y las aplicaciones que de él podían hacerse: Se ve, hasta que punto esta máquina tan sencilla, podía suministrar fuerzas prodigiosas y con facilidad...Sería largo de referir de que manera podría esta invención aplicarse a sacar agua de las minas, arrojar bombas, navegar contra los vientos,...
  • Buscando sobre todo sacar de su máquina atmosférica, un nuevo motor de elevar el agua, había conocido perfectamente que el movimiento alternativo del émbolo en el cuerpo de bomba podía recibir otras aplicaciones y llegar a ser un motor universal, es decir, propuso el uso del vapor para la navegación.
  • Este magnífico conjunto de ideas fundadas sobre experimentos positivos se encuentra consignado como ya se ha dicho en las Actas Eruditorum, 1690, de la página 410 a la 414[29]
  • Cinco años fue cuando aparecieron, con alguna mayor extensión en un pequeño volumen publicado en Cassel, Francia,[30]​ bajo el título: Recueil de diverses pièces... y merecen especial atención de las diversas materias tratadas, las siguientes:
    • El medio de obtener una combustión más activa y perfecta de los hornillos ordinarios.
    • El modo de transformar el movimiento de va-y-ven del émbolo en movimiento circular continuo con auxilio de remos giratorios (este medio era sumamente imperfecto, pero en fin, el problema de la aplicación del vapor a la navegación había sido propuesto y resuelto teóricamente).
    • Esa primera idea del uso de la fuerza motriz desarrollada con el movimiento alternativo del émbolo en el cilindro, es grandemente fecunda e ingeniosa[31]​ por lo siguiente:
      • Un medio de transportar muy lejos la fuerza de los ríos.
      • Ha comprendido la importancia y generalidad del motor universal que introducía, al idear la primera máquina de vapor con émbolo y cilindro, observando antes que nadie que la acción de la fuerza elástica del vapor puede combinarse en una máquina de esta clase, con la propiedad del que goza ese vapor, consignada por él, y ha indicado explícitamente la navegación a vapor.
      • La presentó en 1687 a la Sociedad Real de Londres y la propuso posteriormente al conde Guillermo Mauricio de Solms[32]​ que le había consultado el mejor medio de extraer el agua de una mina, a poca distancia de la cual corría un río cuya fuerza motriz podía utilizarse.

Leupold, Cotes y Boyle[editar]

Muy al contrario del charlatanismo de ciertos inventores que prometen más de lo que pueden obtener, en un principio Papin no se había cuidado de consignar sus invenciones por escrito; y a no ser por el científico de Alemania Jacob Leupold[33]​, Roger Cotes, matemático y profesor de astronomía y filosofía experimental en Cambridge,[34]​ y Robert Boyle, físico y químico de Irlanda,[35]​ no hubiéramos sabido todo lo que a él debemos (también la obra de Thomas Birch Historia de la Sociedad Real de Londres, 4 volúmenes, 1757, contiene muchos hechos auténticos relativos a Papin).[36]

  1. Sobre Delorme: Philibert Dalorme:.../ J.L. Cadée, 2006 ;Philibert de l'Orme: architecte du roi, 1514-1570 / Pérouse de Montclos, París, 2000; Les travaux de Philibert Delorme.../ C. Grodecki, París, 2000
  2. Otra obra: Art et moyen parfaict de tirer huyles.., 1580
  3. Otras obras de Venturi: Biblioteca istorico-critica..., junto a L. Marini, Bologna, 1971 (fortificaciones militares); Tracts on hydraulics, junto a otros autores, London, 1862; Experimental enquires..., London, 1799 (hidráulica). Sobre Venturi: Giambattista Venturi: scienzato, ingegnere, intellettuale,.../ W. Bernardi;.., Firenze: L.S. Olschki, 2005; An appreciation of two great workers in hydraulics: Giovanni Battista Venturi:.../ W.G. Kent, London, Blades, 1912
  4. Obra: Ktesibios,../ A.G. Drachmann, Copenhague, 1948
  5. Otras obras de Rivault: Archimedis..., Parisiis, C. Morellum, 1615; Remostrances de Basile, empereur des Romains,.., París, 1649; Préceptes d'Agapetus à Justinian.., París, 1612; L'art d'embellir.., París, 1608
  6. Otras obras: Hortus palatinus, Worms, 1986; Institution harmonique, Génova, 1980; La pratique et demostration des horgoles solaires.., París, 1624 ;La perspective:.., Londres: R. Barker, 1611. sobre Caus: Magische Maschinen:.../ F. Hepp, Neustadt, Pollichia, 2008; Nature as model: Salomón de Caus.../ L. Morgan, Philadelphia, 2007
  7. Otra obra: Manuale d'architettura, Modena, 1789
  8. Principios muy fecundos y consecuencias muy importantes, con aplicaciones útiles y muy provechosas, pueden deducirse de esta figura. Representa un aparato para pulverizar ciertas materias con el auxilio de un motor maravilloso, cual lo es la cabeza de metal A, con una abertura R donde se introduce el agua. Se la coloca sobre carbones encendidos en el foco C, y como existe en ella una salida por la boca D, se escapará por dicho punto una corriente de vapor tan violento que hará girar la rueda E y un piñón F: estos pondrán en movimiento a la rueda dentada G: y su piñón II, de aquí pasa el movimiento a la rueda I. Después y con el auxilio del pinón K, se transmite a la rueda I, y el árbol cilíndrico que sostiene y levanta alternativamente los dos mazos o manos, y mantenidos sobre los morteros M, por medio de las guias P y Q reducirán a polvo cualquier materia, como pólvora,..etc. (Fol. 24, verso, figura 25 de la primera parte de su obra La máquina.)
  9. Otras obras: Discours de la comete.., Reims, 1616; Selectae propositiones in tota sparsim mathematica..., 1622
  10. Obra: Examen du livre recreations mathematiques..., París: A. Robinot, 1630. Otras obras: Claudi Mydorgii patricii Parisini Prodromi catoptricorum..., París, 1641; Moor's arithmetick:.., junto a Sir Jonas Moore, London, 1660
  11. Otras obras: The quadrature of the circle,..., junto a W.A. Myers, Cincinnati, 1873; Recreations in science...., junto a J. Ozanam, London: W. Tegg, 1854
  12. Arquitectura, Cap. VIII; alguna edición: Los Diez libros de arquitectura de Vitruvio, Madrid: Imprenta Real, 1787, comentada por J. Ortiz Sanz; Arquitectura / trad. y notas F. Manzanero Cano, Madrid: Gredos, 2008
  13. La obra Recréation mathématiques (en español: Recreaciones matemáticas, integrado por varios problemas agradables y graciosos, de hechos de aritmética, geometría, mecánica, óptica y otras partes de esta bella ciencia, Pont-a-Mosusson: J. Appier Hanzelet, 1626) presenta diferentes formas de eolípilas y refiere respectivamente a las formas de cabeza y de pera y al tipo con tubo ensanchado por la parte superior, indicadas en el texto citado, y la última de estas figuras llama la atención por la semejanza con la eolípila para lanzar agua de Salomón de Caus; pero aunque la obra salió años después de la obra de Caus Raisons de forçes, parece probable que no es de ese libro de donde Leurechon ha sacado la figura y la espita de que hace uso no es su carácter esencial, es más bien el tubo que desciende a su interior y que llega casi hasta el fondo del vaso, tubo, por el cual una parte del agua asciende y salta fuera cuando el vaso ha adquirido una tensión suficiente. Obras: Sciences en jeux: les récréations mathématiques et physiques en France.../ G. Chabaud, Lille, 1994, tesis doctoral; Récréations mathématiques et physiques mathématiques et temps.../ WW R. Bail, París: A. Hermann, 1900; Récréations mathématiques / E. Lucas, París: Gauthiers-Villars, 1882-84, 4 volúmenes; Récréations mathématqiues.../ J. Ozanam, París: Firmin Didot, 1790, 4 volúmenes; Récréations mathématiques et physiques.../ M. Guyot, París: libra., rue de la Harpe, 1772-76, 4 volúmenes
  14. Examen du livre des Recrétionas mathématiques../ D. Henrion, París, 1639; Mathematical recreations../ Hengrik van Etten, London, 1633. Bibliografía: A Bibliography of récréations mathématqiues../ W.L. Schaaf, Washington, National Council,.., 1970-, varios volúmenes
  15. Otras obras: La "technica curiosa", Roma, 2000; Joco-seriorum naturae et artis.., Frankfurth and Main, 1969. Sobre Schott: Wunderbar berechenbar:..../ H.J. Vollrath, würzburg: Echter, 2007
  16. Otras obras: Otho-Sophia, seu Philosophia impulsus universalis.., Vetero- Pragae, D. Michalek, 1683; Liturgia mentis,.., Ratisbonae, 1687; Hippócrtaes redivivus.., 1684
  17. A century of the names and the sacntlings of such inventions:..., London: J. Grismond, 1663. Sobre Somerset: The life, times and scientific labours of the second Marquis of Woscester.../ H. Dircks, London, Quaritch, 1865
  18. Cañón entero, Whole cannon, significa entonces en artillería el cañón cuyo calibre se tomaba por tipo. Los que eran de mayor calibre, llamábanse dobles cañones, basiliscos, bombardas, etc; los de menor calibre llamábanse medios cañones, cuarto de cañón, sacres, falcones, falconetes (Montgéry: Annales de l'industr. franc. et strang., marzo de 1823)
  19. Millington, uno de los apologistas de Woscester trata de explicar en su obra citada en el olvido que cayeron los proyectos de lord Woscester y reconoce no obstante, que a muchos de ellos acompaña el sello de la extravagancia y que buen número de personas dudan de su existencia. Otra obra de Millington: Elements of civil engineering,..., Philadelphia, J. Dobson, 1839, 725 páginas
  20. Obras: Calderas de vapor:.../ E. Pull, Barcelona, 1977; La Caldera de vapor:../ L. Cei, Barcelona, 1915; Elementos de máquinas y calderas / J. Nogues Guerrero, Bilbao: Dochao, 19--
  21. Obras: Consolidated Safety Valve.., Chicago, 1909; Mechanics for practical men:../ J. Hann, Newcastle, 1833
  22. El 16 de diciembre de 1680 fue admitido como miembro de la Sociedad Real de Francia, y el 8 de marzo de 1681 fue inscrito en el número de los miembros honorarios: Historia de la Sociedad Real / Thomas Thompson, en 4ª, Londres, 1812
  23. Otras obras: The poor man's dyal,.., 1967; A specimen of dictionary. English and Latin.., London, 1743; Hydrostaticks..., London: J. Lawrence, 1697. Sobre Morland: Sémi...Morlend,../ L. Polunov, Moskva, 1982; A brief account of the life, writtings, and inventions of Samuel Morland.../ J.O. Halliwell-Phillips, Cambridge, 1838
  24. Medida de 133 azumbres
  25. Sea de río o de viento, sea de caballos o de hombres, sea en fin de fuego ordinario o de pólvora
  26. Otras obras de Depping: Histoire du commerce..., New York, 1970, 2 volúmenes; Correspondance administrative sous le règne de Louis XIV:..., París; Impr. Nacion., 1850-55, 4 volúmenes; El Cid:.., Barcelona, 1842; Histoire de la Normandie..., Rouen, 1835, 2 volúmenes; Les peuples de la Russie:.., París: D. Colas, 1812-13, 2 volúmenes
  27. Otras obras de Stuar, pseudónimo de Robert Meikleham: In search of pirates:.., Edinburgh, 2002; A dictionary of architecture:.., Philadelphia: A. Hart, 1973, 3 volúmenes; On the history and art of warming and ventilating rooms..., London, G. Bell, 1845, 2 volúmenes; Correspondence of India affairs:..., junto a Henry Dundas, Vizconde de Melville, 1782, 3 volúmenes
  28. Denys Papin, inventeur & Philosophe cosmopolite 1647-1714 / ch. Cabanes, París, 1935; Denis Papin:.../ Ch. A, Clein, Chambray, 1987
  29. Obras: De "Acta Eruditorum".../ A.H. Laeven, Amsterdam, 1986; Indices generales auctorum et rerum..Actorum eruditorum....., Lipsiae: J. Grossi, 1693-1745, 6 volúmenes.
  30. Le pays de Cassel / Claudine Debussche, A. Sutton, 1998
  31. Primeras aplicaciones de la citada fuerza motriz.-La bomba impelente y aspirante de dos cuerpos, con un émbolo cada uno de ellos, se encuentra dibujada en las Pneumáticas de Herón de Alejandría e indicado especialmente para uso de incendios. Vitruvio atribuye la invención de este ingenioso aparato a Ctesibio. Por otra parte toda máquina tiene su inversa, en la cual se convierte en potencia la que antes era resistencia y vice-versa y era pues natural que se buscase un mecanismo en donde la fuerza motriz obrara encima y debajo de un émbolo dotado del movimiento de vay-vén de un cilíndro y el primero que abordó la cuestión fue C. Huygens, que ideó en 1680 emplear para este uso la pólvora. Pero la idea de usar la pólvora como fuerza motriz no era de Huygens: había sido anunciada el año 1678 en un opúsculo titulado: Pendule perpétuelle,..., por el sacerdote Juan de Hautefeuille, usando únicamente el vacío producido por la combustión de la pólvora para aspirar el agua en un tubo provisto de chapaletas o pequeñas válvulas; pero cuando supo que Huygens había hecho experimentos en los cuales empleábase el vacío para elevar cuerpos sólidos, consignó de nuevo sus ideas en su Reflexiones sur quelques machines à elever les eaux, París, 1682 y al parecer no tuvo Denis Papin conocimiento del opúsculo de Hautefeuille, pero siguió los experimentos de Huygens y hasta le ayudó como dice él mismo en las Actas Eruditorum de 1688, página 501 y atrajo nuevamente la atención de los sabios este objeto el número correspondiente al mes de mayo de 1687 de las Nouvelles Bataves , y en los parrafos de las Actas de Leipzig, 1688. Obras de Huygens: Cosmotheoros:.., Utrecht, 1989; Le cycle harmonique:.., Utrecht, 1986; The celestial worl discover'd, Londo: Cass, 1969; Mathematical principles..., junto a Isaac Newton y otros, Chicago: Encic. Brit, 1962 (reeditada en 1990); Treatise on light:.., Chigago, 1945; Horologium oscillatorium.., París: A. Muguet, 1693; De circuli magnitude inventa..., 1654; sobre Huygens: Huygens:.../ C.D. Andriesse, Cambridge, 2005; Christiann Huygens: facets of a genius / European Space Agency, ESA, 2004. Otras obras de Hautefeuille: Problemes d'acoustique.., París, Varin, 1788; La perfection des instruments de mer.., 1715; Machine loxodromique.., París, 1701
  32. Solmser Urkuden:.../ F. Battenberg, Darmstadt, 1981-86, 5 volúmenes
  33. Alguna obra: Theatrum maquinarum generale.., Hannover, 1982; Thetarum staticum universale, Hannover, 1982, 4 volúmenes; Theatri machinarum hydraulicarum.., Leipzig, 1790
  34. Alguna obra: Hydrostatical and pneumatical lectures, London:.., in Cambridge, 1775; editor de la obra de I. Newton Philosophiae naturalis.., Amstaelodami, 1723
  35. Boyle cita en el tomo II de sus obras publicadas en latín en Ginebra, que contiene Experimentorum novorum.., la obra de 1674 de Papin Nuevos experimentos del vacio, con la descripción de las máquinas que sirven para hacerlo; y dice el mismo Boyle que le remitió la citada obra el mismo Papin y sus citas indican que este pequeño volumen de Papin, experiencias sobre las sustancias vegetales alimenticias, fueron practicadas en la mayor parte en común por Huygens y Papin. Posteriormente Papin fue acogido por Boyle en Inglaterra y le propuso auxiliarle en sus investigacione y acogerle en su laboratorio y los trabajos en común empezaron el 11 de julio de 1676 y terminaron el 17 de febrero de 1679. Papin redactaba las actas en francés, las traducia al latín y del latín se vertieron al inglés para las obras completas de Boyle editadas en Londres por A. Millar, 1744, en 5 volúmenes. Obras de Boyle: The works of Robert Boyle, London, 1999-2000, 14 volúmenes; junto a R. Fitzgerald Salt-water sweetened,.., London, 1985; De ipsa natura.., Londini, 1984; Exercitaciones de atmosphaeris,.., Londres, 1981. Sobre Boyle: Boyle:../ M.C.W. Hunter, New Haven: Yale Univers. Press, 2009; The excellencies of Robert Boyle / J.J. Macintosh, Peterborough, 2008
  36. Esta obra se ha reeditado en New York, 1968, por Johnson Reprint The history of Royal Society of London...con nueva introducción de A. Rupet Hall y notas bibliográficas por Marie Boas Hall. Otras obras de Birch: Memoirs of the reign of Queen Elizabeth.., New York, 1970; Tensión arterial,.., Madrid: Reus, 1961; The court and times of Charles the First:.., London: Henry Colburn, 1849. Sobre Birch An introduction to the life of the Rev. Thomas Birch.../ A.E. Gunther, Halesworth, 1984